Muchos nombres, pocos minutos

Aunque el pasado sábado el tinerfeñismo pudo presumir de canariedad en el infeliz partido con el Amorebieta, con hasta seis futbolistas isleños en la convocatoria del primer equipo, la realidad es que los jugadores de la cadena de filiales han tenido poco margen para lucir a lo largo del curso que está ya próximo a su conclusión. Eso sí, es probable que en las dos jornadas finales sí haya más espacio para alguno de ellos.

A estas alturas de la temporada y excluido el muy particular caso de Loïc Williams, que vino para el B y desde el primer momento adquirió la condición de jugador del primer equipo a casi todos los efectos, han sido 14 los futbolistas de la base citados en alguna oportunidad por Asier. Entre ellos hay cuatro guardametas que se han ido turnando en la misión de acompañar a los cancerberos profesionales (Soriano y Tomeu). Empezó siendo Moha Ramos el elegido durante la pretemporada y luego tuvieron su momento Aragoneses Junior –sobre todo en la Copa del Rey–, Brian Mahugo en un par de oportunidades, y también Martín Cascajo antes de caer lesionado de gravedad.

El futbolista del B con mayor participación con los mayores ha sido Jesús Belza, polivalente lateral –también jugó en algunas ocasiones en posiciones más ofensivas– que llegó a acumular 10 participaciones ligueras y hasta cuatro titularidades hasta disputar 411’ en la Hypermotion en el mismo curso de su debut a escala profesional. Su eclosión prometía, pero en la segunda mitad de la temporada bajó otra vez al filial y se erigió en uno de sus baluartes. Para Garitano, desapareció hasta el punto de no ir citado contra el Amorebieta –ni tampoco en los partidos inmediatamente anteriores– pese a que estuviera Fer Medrano fuera de combate y sancionado Mellot para el último fin de semana.

Caso diametralmente opuesto es el del delantero Ethyan González, olvidado en el primer semestre de la competición y rescatado para el segundo. Ha jugado tres partidos (17’ en total) con algún momento estelar como en el esprint final hacia la victoria contra el Racing de Ferrol en su día más feliz de la temporada, pues coincidió con la fecha del ascenso del segundo equipo a Segunda RFEF, que ese mismo domingo se celebró en el Heliodoro.

El presente año futbolístico ha traído consigo también alguna oportunidad puntual para Salifo Caropitche (13 minutos en total); el reestreno del palmero Cacho, que ya había debutado con Ramis, que le había dado dos partidos; y la puesta de largo en competición oficial de Isaac Hernández en la Copa del Rey. Más recientemente han ido citados tanto César Álvarez como Marcos Otero, dos de las más rutilantes promesas del filial y claves en su cambio de categoría. De hecho, figuran en casi todas las quinielas para hacer la próxima pretemporada con el primer equipo y es posible que tengan su momento para debutar en Segunda en los partidos venideros contra Burgos y Valladolid.

Casos distintos son los de Pablo Hernández y Alassan Gutiérrez. El primero adquirió dorsal profesional en verano y el segundo llegó a tener sus minutos y oportunidades con el primer equipo. No obstante, en enero se abogó por su salida y ambos se fueron al mismo destino: Melilla. Tienen contrato y regresarán en verano.

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