En las postrimerías del siglo XIX, concretamente en 1890, Santa Cruz de Tenerife entraba en la era de la modernidad en cuanto a transporte terrestre, puesto que ese mismo año el primer artilugio mecánico autopropulsado inicia su andadura desde la Cantera de la Jurada hasta el Muelle Sur, cuya obra se encontraba en pleno auge. Si este medio de transporte llamó poderosamente la atención de los habitantes de nuestra isla, no menos espectacular fue la instalación de la enorme grúa "Titan" en 1887, que venía a completar los trabajos de la locomotora "Añaza" para la culminación de las obras portuarias.

La grúa "Titan", por sus características técnicas, llamó la atención puesto que nunca antes en Tenerife se había visto nada parecido y se convirtió en la mayor obra de ingeniería técnica-mecánica jamás observada hasta la fecha en nuestra isla. El fabricante de la misma fue la Casa Krupp de Alemania, especialista en este tipo de diseños y que para su instalación envió al ingeniero don Luis Braun Stopp, quien, a pesar de su juventud, contaba sólo con 30 años y estaba considerado como un buen instalador y experimentado técnico en estas labores.

Don Luis Braun no sólo cumplió a la perfección su cometido, sino que una vez finalizado el mismo optó por quedarse definitivamente entre nosotros junto con su esposa la Sra. Ana Mulak e hijos. Su profesionalidad y honradez le permitió instalarse por su propia cuenta, inaugurando un taller mecánico en el que atendía cualquier avería e incluso fabricaba las piezas que le fueran solicitadas. Es una lástima que los documentos que poseo al respecto no indiquen la calle -a pesar de mis intentos por encontrar la dirección-, pero el aquí reproducido da una idea de la variada actividad que se desarrollaba en los mismos. Como dato curioso he de decir que la cantidad de coches-automóviles al día de la fecha de la citada factura eran sólo de 2 vehículos "Panhard and Levassor", por lo que dudo que don Luis Braun tuviera ocasión de contarlos como clientes de su taller.

Sus buenas relaciones personales, acompañadas siempre de su buen hacer y sus amplios conocimientos mecánicos, provocan que años después su prestigio profesional sea solicitado por conocidos empresarios del ramo automovilístico, y es así cómo don Luis inicia relaciones laborales con don Jacobo Ahlers, a la sazón ya representante de la casa "Daimler Motoren Gasellschaft", fabricante posteriormente de los "Mercedes Benz" y que comenzaban a despuntar como marca puntera en Tenerife. Para atender las posibles averías de estos vehículos, don Jacobo montó en 1922 un taller sito en el Camino Salamanca al que "bautiza" con el nombre de "Gran Taller Mercedes". El mismo estaba provisto de las herramientas más modernas, poseía horno para la fundición de piezas en bronce o hierro, prensa hidráulica de 805 toneladas, aparato vulcanizador, soldadura autógena, repuestos para "Daimler" y "Mercedes" y existencia de motores "AEG" de benzina, petróleo y aceite crudo. Además, ese mismo año se le añadirían los coches "Hansa-Lloyd" y "Rex Simplex", marcas con las que don Luis Braun Stopp mantuvo estrecho contacto, ya que desempeñaba las funciones de gerente de dichos talleres.

En 1930 don Jacobo Ahlers pone a la venta su taller junto con toda la mecánica y enseres, cesando por tanto en las funciones de gerente a don Luis Braun.

Don Luis Braun Stopp, tras haber dejado su imborrable huella empresarial y personal en la historia del automovilismo insular, falleció en Tenerife en el año 1945.

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