El salón de actos de la Real Sociedad Económica de Amigos del País en La Laguna acogió ayer una ponencia a cargo del presidente de la Asociación Provincial de Agricultores y Ganaderos (Asaga), Henry Sicilia, en la que, bajo el título "Mejoras de la política de autoabastecimiento agrario como medida para el crecimiento del sector", demandó a las instituciones públicas el establecimiento de una serie de medidas para conseguir "la sensibilización entre la población para impulsar el consumo de productos locales".

Al respecto, Sicilia destacó que este tipo de acciones "entroncarían con la soberanía alimentaria; un término que se refiere al derecho de los pueblos a dirigir su propio suministro de alimentos para reforzar su medio ambiente sostenible y sus economías locales, en contraposición a las políticas de libre mercado que si lo permitimos nos llevarán a todos por delante".

Según recalcó, "aunque hemos visto en muchos casos que la oferta local se ha incrementado, el peso de la producción canaria total disponible de alimentos en el Archipiélago es cada vez menor".

De esta forma, subrayó que "las importaciones han crecido, llegándose incluso a triplicar, para poder atender la demanda de una población creciente, con un incremento en el número de visitantes y con mayores niveles de renta".

En esta línea, precisó que "dado que el nivel de producción local no alcanza, en la mayoría de los casos, ni siquiera el 10%, todavía tenemos un importante margen para ampliar nuestra cuota en el mercado interior".

A su juicio, a pesar del "descenso que ha registrado en las últimas décadas el sector agrario en las Islas, al igual que en la mayoría de las sociedades desarrolladas", esta actividad "ha sido y es una valiosa herramienta de la economía canaria que cumple una función productiva y, entre otros cometidos, origina recursos financieros, acoge mano de obra, conserva el medio ambiente, la superficie cultivada mejora las condiciones contra la desertificación y la prevención de incendios y, por lo tanto, cuida el entorno natural, mantiene el paisaje tradicional y estructura la organización económica y social en la totalidad de los espacios rurales".

El titular de Asaga reconoció que los hábitos de consumo han variado en los últimos años y que estamos en momentos de crisis generalizada, pero argumentó que "debemos ver el lado positivo, para que esta situación se convierta en un banco de oportunidades que nos ayude a recuperar parte del protagonismo de antaño, que nunca se debió perder en nuestro territorio".

Para ello, abogó por la profesionalización "como una de las claves para el avance de nuestro sector y para el diseño, la disposición y organización de nuestros sistemas de estructuras agrarias".