El Archipiélago cerró 2009 con el mayor descenso del país en las matriculaciones de automóviles, un 30,4% en comparación con el año anterior. En total se vendieron en Canarias 30.606 vehículos, 12.772 de ellos en la provincia tinerfeña (-29,5%) y 17.834 en la de Las Palmas (-31%), según los datos publicados ayer por las asociaciones nacionales de fabricantes (Anfac) y vendedores (Ganvam).

No obstante, cabe destacar que en diciembre el bajón fue notablemente inferior a esa media anual, como viene ocurriendo desde hace meses, gracias al tirón de las ayudas directas a la compra enmarcadas en el Plan 2000E. La caída interanual (respecto a diciembre de 2008) quedó en el 9,8%, después de que se vendieran 3.385 coches.

Eso sí, el descenso sólo se dio en Las Palmas (-16,3%), dado que en Santa Cruz de Tenerife se produjo un repunte del 2,4%, tras la venta de 1.324 automóviles. Este incremento es notablemente inferior al que se registró en el conjunto estatal (25,1%), que computó 90.553 matriculaciones.

También tuvo mejor comportamiento la media estatal en el acumulado del ejercicio, en el que se realizaron 952.772 operaciones (-17,9%), el peor dato desde 1995.

El año estuvo marcado por una primera mitad de fuertes caídas y una recuperación, a partir de agosto, al amparo del Plan 2000E, que se aprobó el 18 de mayo.

Anfac y Ganvam señalaron ayer que el efecto corrector de esta iniciativa ha supuesto una demanda adicional de unos 125.000 turismos, lo que ha recortado la previsión inicial de un retroceso del 25%.

Pese a ello, contraponen este resultado con el de 2007, y la diferencia es de 600.000 coches.

La influencia del 2000E en el mercado se pone de manifiesto con el resultado de las matriculaciones de los turismos con emisiones por debajo de los 149 gramos de dióxido de carbono (CO2) por kilómetro, que son sus beneficiarios.

Durante el año se han matriculado en este tramo de emisiones contaminantes 643.518 unidades (el 67,5% del total), un 1,3% más que en 2008, con un crecimiento en diciembre del 79,2%.