La bolsa española bajó hoy el 0,03 por ciento afectada por la caída de Wall Street tras conocerse los datos de paro de Estados Unidos de diciembre y por el retroceso de algunos grandes valores.

Así, el principal índice de la bolsa española, el Ibex-35, cayó 3,30 puntos, equivalentes al 0,03 por ciento, hasta 12.163 puntos. En la primera semana del año avanza el 1,87 por ciento.

En Europa, con el euro en 1,433 dólares, París subió el 0,51 por ciento; Milán, el 0,43 por ciento; el índice Euro Stoxx 50, el 0,35 por ciento; Fráncfort, el 0,3 por ciento, y Londres, el 0,14 por ciento.

La bolsa española superaba el nivel de 12.200 puntos en la apertura, beneficiada por el alza de Wall Street el día anterior y de Tokio esta madrugada.

Tras el impulso inicial, la bolsa descendió a los niveles de la víspera, sin que influyera demasiado la mejora del superávit comercial alemán o la confirmación de la salida de la recesión de la zona euro: el PIB del tercer trimestre crecía el 0,4 por ciento, o el aumento del paro italiano una décima en noviembre.

Los datos de empleo estadounidenses de diciembre, que registraban 85.000 parados más y superaban las previsiones, aunque la tasa de paro se mantuvo en el 10 por ciento, provocaron un brusco retroceso de la bolsa, que perdió cerca del 1 por ciento de golpe y se situó bajo el nivel de 12.100 puntos.

El impacto de las estadísticas de desempleo era mitigado por las pequeñas pérdidas de Wall Street en la apertura, así como por la recuperación del precio del petróleo, que tras bajar a 80,5 dólares volvía al final de la sesión a negociarse a más de 81, aunque el retroceso de algunos grandes valores impedía a la bolsa española acabar con ganancias.

De estas compañías destacó la bajada de Telefónica, el 1,75 por ciento, la segunda mayor caída del Ibex, perjudicada por un informe negativo; Repsol, el 0,11 por ciento, e Iberdrola, el 0,1 por ciento, mientras que BBVA subió el 0,77 por ciento y Banco Santander, el 0,34 por ciento.

Ebro Puleva lideró las pérdidas del Ibex con una caída del 1,89 por ciento, seguida de Telefónica, mientras que Grifols cedió el 1,49 por ciento, y Abengoa, el 1,1 por ciento, a pesar de haber obtenido un contrato en Perú.

Las constructoras figuraron en lugares destacados del Ibex por los planes del Ministerio de Fomento de acortar los plazos de ejecución de obras públicas y por la consecución de contratos.

Así, la principal subida correspondió a Sacyr, que ganó el 7,05 por ciento, seguida de Banesto, con un alza del 4,73 por ciento, en tanto que Acciona avanzó el 3,06 por ciento, e Iberdrola Renovables, por un informe favorable y por la obtención de una concesión de un parque eólico en el Reino Unido, el 2,82 por ciento.

En el mercado continuo destacó nuevamente la subida de Reyal Urbis, el 45,09 por ciento, seguida de otras inmobiliarias, por noticias que hablan de la renegociación de su deuda y por motivos especulativos, mientras que Sos Corporación lideró otra vez las pérdidas con un descenso del 4,33 por ciento.

La rentabilidad de la deuda española bajaba tres centésimas y se situaba en el 3,94 por ciento, mientras que el efectivo negociado en el mercado continuo ascendió a 3.615 millones, de los que algo más de 1.150 procedieron de operaciones efectuadas por los inversores institucionales.