s. canarias 85

ub la palma 78

Socas CanariasUrreizti (3), Heras (14), Rost (10), Guillén (17), Donaldson (15) -inicial-, Yáñez (9), Cage (2), Chagoyen (15).

UB La PalmaMena (3), Josemi (11), Bonhome (6), Padgett (12), Palacios (6) -inicial-, Olmos (7), Gruber (0), Ibarra (12), Orfila (8) y Arrocha (13).

Árbitros Martínez Prada y Miguel A. Palenzuela. Sin eliminados.

Parciales11-11, 25-20, 38-27, 48-37; 58-44, 68-48, 76-62, 85-78.

IncidenciasPabellón Ríos Tejera. Lleno (2.850 espectadores). Excelente ambiente, con presencia de un centenar de aficionados del UB La Palma que animó a los suyos de principio a fin de partido. En el minuto 27 se retiró a la enfermería Donaldson, que recibió 4 puntos de sutura al recibir un golpe en la nariz. Tres consejeros del Tenerife CB -Yumar, Victoriano y Padrón- presenciaron el partido invitados por el CB Canarias.

El Socas Canarias sigue ostentando la hegemonía en el baloncesto provincial tras sumar su tercera victoria en sus confrontaciones con el UB La Palma y el Rural. Los de Alejandro Martínez se impusieron anoche a los de Rafa Sanz por 85 a 78, un margen de 7 tantos que en absoluto refleja lo acontecido sobre el parquet de la "catedral", toda vez que el Socas Canarias jugó por encima de los 15 puntos a partir del minuto 15, llegando incluso a situarse con un +22 (69-47) en el minuto 27, precisamente cuando Jakim necesitó atención médica tras recibir un golpe en la parte superior de su nariz que le hizo recibir cuatro puntos de sutura, optando el técnico por no arriesgar con su reingreso a pista.

El UB La Palma decepcionó de nuevo lejos de Miraflores, pues se mostró muy blando y vulnerable atrás, convirtiéndose en un invitado amable, incapaz de crear el más mínimo problema al plantel aurinegro. Sólo en el último cuarto, cuando el averiado electrónico -un marcador señalaba que restaba un tiempo y el otro 6 segundos más- el UB sacó su casta y apeló al orgullo de Sebas Arrocha -anotó sus 13 tantos en este periodo final- para acabar con un tanteo más decoroso pero que, insistimos, no tuvo nada que ver con el desarrollo del encuentro.

Los foráneos comenzaron con un 2-7, con 2+3 de Josemi desde el exterior. Muy pronto el Canarias puso las cosas en su sitio -después de ver cómo Orfila ganaba el rebote ofensivo con facilidad- y con 6 tantos de Guillén, 7 de Jakim y dos triples de Heras dejaron la diferencia en 5 tantos en el primer parón (25-20). Ya por entonces Palacios estaba con 2 faltas y los árbitros habían señalado 3 a los locales y 8 a los visitantes.

En el arranque se pasó en apenas 45 segundos del 29-22 al 29-27, con un 2+3 de Ibarra. Una espectacular bandeja de Heras a aro pasado para evitar el tapón fue el despegue. A partir de aquí sólo el Socas Canarias dio muestras de tener oficio para poner aire de por medio y, con otro acierto desde el 6,75 de Jaime -el de Las Mercedes volvió a asumir la dirección con acierto-, tres canastas bien elaboradas de Chagoyen y 7 puntos de Nacho firmaron el 48-37 del descanso.

Los números del UB La Palma en los primeros 20 minutos fueron realmente malos, al igual que su intensidad defensiva. Rafa Sanz había dicho en la previa que para ser fuera el equipo agresivo de Miraflores se hacía necesario tener más convicción, más garra, pero esas armas se quedaron en la Isla Bonita. La valoración en las estadísticas reflejaba lo acontecido: 60 el Socas Canarias por los 30 del conjunto de Rafa Sanz.

En apenas 4 minutos de la reanudación los locales alcanzan el +19 (63-44), lo que anima a Sanz a parar el partido. Aquí Jakim se va a la enfermería, donde el doctor Rodríguez-Jaubert le pone cuatro puntos de sutura.

El "UB" se mete en defensa en zona que no afectó lo más mínimo al Canarias, pues movieron el balón y buscaron el tiro o el pase al interior para provocar la falta e ir al 4,60. Un 1+1 de Jesús elevó la renta a los 22 (69-47), concluyendo el tercer cuarto con 20 de margen (68-48) y una afición volcada que comenzó a hacer la ola.

En los 10 minutos finales el cuadro palmero sacó su casta y buscó el orgullo para no defraudar a unos seguidores que no dejaron de hacer sonar sus bombos y que estaban sufriendo una de las más pobres actuaciones de los suyos.

Entonces apareció la figura del Sebas Arrocha, que con 13 tantos casi consecutivos, más la aportación desde 4 metros de Padgett, hicieron que la diferencia bajara, primero a los 9 tantos (77-68; 36 m.) y al final se quedara en 7 (85-78), festejado con la misma alegría.