La bolsa española bajó hoy el 1,93 por ciento y retrocedió hasta 10.800 puntos perjudicada por la caída de los mercados internacionales y de los grandes valores.

Así, el principal índice de la bolsa española, el Ibex-35, cayó 212,90 puntos, equivalentes al 1,93 por ciento, hasta 10.829,30 unidades, con lo que se sitúa en niveles de mediados de agosto de 2009. Las pérdidas anuales se sitúan en el 9,3 por ciento.

En Europa, con el euro en 1,395 dólares, París cayó el 1,89 por ciento; Fráncfort, el 1,82 por ciento; el índice Euro Stoxx 50 y Milán, el 1,79 por ciento cada uno, y Londres, el 1,37 por ciento.

Después de la subida del 0,4 por ciento de Wall Street en la sesión anterior tras el mantenimiento de los tipos de interés en Estados Unidos entre el 0 y el 0,25 por ciento y el discurso del presidente Barack Obama de contención del gasto, la bolsa española despertó con una subida del 1 por ciento que le acercaba a 11.200 puntos.

El mercado nacional ignoraba el aumento del paro alemán hasta el 8,2 por ciento y se beneficiaba del rebote de las plazas europeas y los precios asequibles que registraban algunas empresas tras las recientes caídas.

La bolsa, que también aprovechaba el repunte del precio del petróleo, que superaba 73 dólares por barril, estaba pendiente de los resultados empresariales que se fueron conociendo a lo largo de la sesión (Ford, 3M, Kodak, ATT, Procter and Gamble).

Las ganancias de la bolsa se redujeron por la posterior caída de la cotización del crudo, unida al escaso crecimiento de los pedidos de bienes duraderos en Estados Unidos el 0,3 por ciento el mes pasado y al descenso en 8.000, hasta 470.000, de las peticiones de subsidios de desempleo semanales en ese mismo país, menos de lo esperado.

Esto condicionó la apertura a la baja de Wall Street, que fue agrandando sus pérdidas mientras el petróleo bajaba a 72 dólares y prescindía de la mejora de la actividad en la región de Chicago. Así, la bolsa perdía los niveles de 11.000 y 10.900 puntos una hora y media antes del cierre, con el euro a la baja, a 1,395 dólares.

Todos los grandes valores bajaron: Telefónica, el 2,84 por ciento; BBVA, el 2,57 por ciento; Iberdrola, el 1,87 por ciento; Banco Santander, el 1,86 por ciento, y Repsol, el 1,55 por ciento.

La mayor caída del Ibex correspondió a Indra, el 5,16 por ciento, perjudicada por un informe negativo, mientras que Sacyr bajó el 4,37 por ciento; Grifols, el 4,22 por ciento, y Gamesa, el 4,04 por ciento.

Sólo tres empresas del Ibex concluyeron con ganancias: Inditex, que ganó el 2,91 por ciento gracias a los buenos resultados de su competidora Hennes y Mauritz, seguida de Ebro Puleva, que avanzó el 0,99 por ciento por su disposición a vender su negocio lácteo, y BME, con un alza del 0,48 por ciento.

En el mercado continuo, Reyal Urbis presidió las pérdidas con un descenso del 8,16 por ciento, mientras que Befesa comandó los avances con un alza del 8,8 por ciento.

La rentabilidad de la deuda española subía nueve centésimas y se situaba en el 4,19 por ciento, mientras que el efectivo negociado en el mercado continuo se elevaba a 5.252 millones, de los que algo menos de 2.000 procedían de operaciones efectuadas por inversores institucionales.