Un 16% de los profesores interinos y sustitutos que trabajan actualmente en especialidades en las que se convocarán oposiciones durante este año son de larga duración; es decir, llevan en el sistema educativo más de doce años. Se trata de los conocidos como interinos "pata negra" y son 299 de los 1.843 docentes que ocupan plazas en régimen de interinidad o realizan sustituciones, según los datos facilitados por la Consejería de Educación del Gobierno regional.

La gran mayoría de ellos (270) está en el sistema desde antes de 1995, mientras que cien permanecen en él desde antes de 1990. Desde esa última fecha se han convocado trece oposiciones para las especialidades de Secundaria, por lo que han dispuesto de trece oportunidades de obtener plaza y acceder al funcionariado.

En los procesos selectivos convocados en estos últimos veinte años la Administración educativa ha ofertado 7.687 plazas correspondientes a niveles de Secundaria -6.556 en ESO, 713 para profesores técnicos de Formación Profesional, 318 en escuelas oficiales de idiomas, 71 para profesores de artes plásticas y diseño y 29 para maestros de taller de estas últimas enseñanzas-, así como 5.931 para el cuerpo de maestros.

De hecho, la mayor parte de quienes han aprobado oposiciones en los últimos cuatro años y se han convertido en funcionarios docentes ejercían antes como interinos. En concreto, 2.088 de los 2.724 nuevos funcionarios -más de un 76%- figuraban antes en las listas.

Las especialidades que serán convocadas en 2010 en las que trabajan más interinos de larga duración son Lengua Castellana y Literatura e Inglés, ambas con 46, seguidas de Matemáticas, con 41. En la convocatoria de este año se ofertará un total de 700 plazas.

Antigüedad y experiencia

La conformación y ordenación de las actuales listas de reserva en la enseñanza tiene como criterio fundamental la antigüedad y la experiencia. Cuando los aprobados sin plaza se incorporan a las listas -cada cuatro años, según establece el acuerdo suscrito por el Gobierno canario y las organizaciones sindicales- lo hacen justo a continuación del último trabajador interino que forme parte de ellas.

Este sistema es el que pretende modificar la Administración autonómica para dar un mayor peso a los resultados de las oposiciones. El decreto que recoge esta reforma -suspendido temporalmente la pasada semana por el Ejecutivo para retomar la negociación con los sindicatos- sitúa en primer lugar a los aprobados sin plaza y sólo evalúa los méritos a quienes hayan obtenido al menos un 25% del total de la nota.

Aunque los sindicatos han alertado de los perjuicios que esta reforma podría acarrear al colectivo de interinos, y especialmente a los docentes de mayor edad y con más años de experiencia, fuentes de la Administración educativa -que también aluden a la elevada proporción de interinos que accede al funcionariado- sostienen que las posibilidades de aprobar el proceso de concurso-oposición son "muy altas", pues la fase de concurso consta de tres fases no eliminatorias, dos de las cuales consisten en la presentación y defensa de unidad didáctica y programación, que suman un 60% de la nota, mientras que la parte teórica supone el 40%. El mayor peso de las pruebas prácticas, por lo tanto, daría más facilidades a los docentes con experiencia, a los que, en caso de aprobar, se les sumarían los méritos, alega la Administración.