Una mujer falleció a manos de su pareja en la zona de El Mayorazgo de La Orotava. El presunto agresor, F.J.G.G., de 51 años y de origen canario, tras cometer el crimen se precipitó al vacío del tercer piso del domicilio donde vivían. El hombre fue trasladado en estado crítica al Hospital Universitario de Canarias (HUC), donde fue intervenido quirúrgicamente.

La víctima, María del Carmen L.C., de 49 años, era natural del barrio de El Bebedero, ubicado en las medianías de la Villa norteña.

Según aseguraron vecinos de la zona, en torno a las 07:00 horas comenzaron a escucharse "ruidos extraños y fuertes en la casa de la pareja. Alertados por estos golpes, llegamos a pensar que se podía tratar de un caso de violencia de género. Cerca de las 08:00 horas, el hombre se tiró desde el tercer piso donde vivía. Al final confirmamos nuestras sospechas".

La Guardia Civil fue alertada por el Centro de Emergencias 112 de que un hombre se había precipitado desde un tercer piso en el barrio de El Mayorazgo.

Una vez los servicios de emergencias asistieron al varón. Los agentes entraron en el domicilio, donde encontraron a su pareja sentimental fallecida con claros signos de muerte violenta.

Hasta el lugar de los hechos se trasladaron miembros de la Autoridad Judicial y el Equipo de Criminalística de la Guardia Civil, quienes realizaron la inspección ocular y las correspondientes diligencias.

El cuerpo sin vida de la mujer fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Santa Cruz de Tenerife sobre las 14:00 horas.

Según informó la Benemérita en una nota, la mujer no había realizado ninguna denuncia referida a violencia de género.

Hasta el lugar del suceso acudieron a lo largo de la mañana de ayer varios familiares de la víctima, quienes no daban crédito a lo que había ocurrido, pues describieron al supuesto agresor como una persona muy tranquila y de buen carácter.

"Era muy normal y nunca vimos ningún signo que hiciera pensar en que fuera alguien violento, todo lo contrario. Era un hombre tranquilo, y la relación con ella era, en apariencia, buena y estable", explicaron las mismas fuentes.

Pese al carácter tranquilo que en apariencia tenía el hombre, estos familiares destacaron que "últimamente se encontraba en un estado depresivo".

"La verdad es que estaba un poco deprimido porque se había quedado en paro y no encontraba ningún trabajo, y este hecho le estaba afectando bastante. Pero no pensamos que pudiera pasar algo así", señalaron.

La víctima, según señalaron a este periódico estas fuentes, mantenía una relación sentimental con el presunto agresor desde "hacía cerca de ocho años y tenía un hijo de otra pareja".

La consternación también se palpaba también en los vecinos de esta zona de El Mayorazgo, quienes no supieron determinar desde cuándo vivía en ese domicilio la pareja. Según algunos residentes de la zona, "las discusiones entre la pareja eran frecuentes", aunque otros aseguraron que nunca habían "escuchado, ni visto, ninguna discusión entre ambos".

Respecto al estado del agresor, en la tarde ayer aún se desconocía, aunque fuentes policiales señalaron que pasará a disposición policial imputado de un delito de homicidio.