Año nuevo, vida nueva. Eso dice el refrán, pero no lo tiene tan claro el Tenerife, que sólo estrena director deportivo, Juanjo Lorenzo, en este 2011. La plantilla y el cuerpo técnico siguen siendo los mismos que abochornaron a la afición blanquiazul en su última comparecencia en casa ante el Betis. Su posición, la de colista, tampoco ha cambiado por unos días de vacaciones. Más allá de sentirse fiscalizados por la presencia del nuevo responsable del área deportiva en las gradas de Zorrilla, no se atisban nuevas motivaciones para un equipo que necesita un cambio tan urgente como radical.

Fiel a su trayectoria en el banquillo insular, Juan Carlos Mandía sí incluirá varias novedades en su formación inicial. La primera será obligada ante la baja por sanción de Bertrán. Su relevo natural, Aitor Núñez, tampoco parece que vaya a tener su oportunidad esta vez. Si en Vallecas jugó Juanlu, el que tiene más papeletas en esta ocasión es el grancanario Pablo Sicilia. Precisamente, el cordobés puede jugar por delante del central (y ahora improvisado lateral), desplazando a Julio Álvarez a la banda izquierda del centro del campo. El regreso de Ezequiel Luna, injustamente suplente en el choque anterior, en lugar del desafortunado ante el Betis David Prieto puede cerrar las novedades del once.

Pero si el partido llega con urgencias para los blanquiazules, no dista mucho de lo que se vive en la acera vallisoletana. Abel Resino aún no conoce la victoria desde que se hizo cargo del equipo y, a la espera de movimientos en el mercado invernal, se aferra con fuerza a la visita del colista para cambiar la racha. Con la baja de Sisi por sanción y Pedro López por lesión, el técnico elegirá previsiblemente a Barragán para el lateral derecho y el dúo Nauzet-Jofre para ocupar las bandas del centro del campo. En estos días se había especulado con la salida de su goleador Javi Guerra (tiene una oferta del Málaga), pero de momento seguirá siendo la referencia ofensiva del Valladolid.