Después de unos meses ajetreados, en los que por fin ha podido solucionar sus problemas con las autoridades y ha cumplido íntegramente su programa de rehabilitación, Lindsay Lohan está preparada para emprender un nuevo camino lejos de escándalos mediáticos. La joven, que tiene previsto abandonar la clínica Betty Ford esta semana, ha manifestado públicamente su intención de comenzar una nueva vida.

Lindsay Lohan quiere dejar su pasado atrás definitivamente. Las peleas mediáticas con su padre, sus escarceos con las drogas, los problemas con la justicia estadounidense... Todos esos aspectos que compusieron su vida durante años han quedado descartados.

La joven se ha unido a la costumbre de establecer propósitos de Año Nuevo y, aprovechando que esta semana tiene prevista su salida de la clínica Betty Ford, ha comunicado que quiere comenzar una nueva vida y centrarse en ir mejorando poco a poco.

"HOY ES EL PRIMER DÍA DEL RESTO DE MI VIDA"

"Hoy es el primer día del resto de mi vida. ''El futuro depende de lo que hagamos en el presente'', Mahatma Gandhi... Un paso cada vez...", escribió la protagonista de Chicas Malas en su Twitter.

Aunque esté decidida a cambiar, puede que quizá encuentre alguna que otra dificultad en el terreno profesional. Sus escándalos no le han ayudado a mantener contratos, pero desde que ingresó en la clínica Lohan ya empezó a mover fichas para asegurar su posición.

Los responsables cinematográficos empezaron a rechazarla para sus proyectos por su falta de seriedad a la hora de comprometerse, pero la joven supo aprovechar su valía y se decidió por otro tipo de ocupación más flexible: el diseño de bolsos.

Así, durante su estancia en rehabilitación Lohan ha seguido trabajando en su empresa 6126, para la que ha diseñado una nueva línea de bolsos que podría ver la luz tan pronto como salga de la clínica.