La futura vía que unirá los núcleos de Ofra, a la altura de la avenida Príncipes de España, y El Chorrillo tiene, desde hace años, acondicionado el enlace con la TF-2 (la vía de conexión entre ambas autopistas que une Santa María del Mar con Las Chumberas). Este "empalme" entre ambas vías se realizó, en su momento, a través de dos rotondas que, además, dan servicio a las poblaciones de los barrios de El Rosario y El Draguillo.

Sin embargo, debido al tiempo transcurrido desde que culminase esta fase inicial de las obras, las dos rotondas se han ido convirtiendo, con el paso del tiempo y la falta de urbanidad de algunos, en un verdadero vertedero improvisado en el que se acumulan basuras de todo tipo, desde enseres domésticos a colchones, así como escombros procedentes de obras de construcción.

Esta situación ha sido reiteradamente denunciada por los vecinos de la zona, que no salen de su asombro por el progresivo deterioro del enlace, una obra que no será recibida por el Ayuntamiento de Santa Cruz hasta que el Gobierno de Canarias culmine el proyecto de la mencionada vía Ofra-El Chorrillo.

Además, los vecinos no sólo se quejan de la basura y sus molestias asociadas, como la presencia de toda clase de bichos o los malos olores, sino que también han advertido la presencia, en ocasiones, de conductores de camiones que aprovechan la nula iluminación de la zona y el poco tráfico del entorno para realizar paradas de descanso con sus vehículos.

A esta anómala situación se suma la paradoja de que, pese a que la obra no está oficialmente concluida, los conductores que quieren salir de la TF-2 hacia los barrios de El Rosario y El Draguillo sí hacen uso de ambas rotondas, lo que ha ocasionado algún accidente de tráfico.

En este sentido, cabe especificar que, al tratarse de una obra incompleta, no existe ningún tipo de iluminación, ni de señalización horizontal o vertical colocada, por lo que algún conductor despistado ya ha ocasionado algún accidente al transitar en dirección contraria o intentar incorporarse a la TF-2 por el sentido contrario al pretendido.

Esta situación ya ha sido informada por el tagoror del Distrito Suroeste a través de una reclamación en la que se solicitaba la adopción de las medidas oportunas para que el Ejecutivo regional acondicione este espacio o, en su defecto, lo cierre mediante un vallado hasta que la obra esté finalizada.

Con respecto al estado de la obra, hay que señalar que ya se ha concluido por parte del Ayuntamiento de Santa Cruz el proceso de expropiaciones del barrio de Las Moraditas, donde se han desalojado las viviendas afectadas, tras construirse nuevos hogares para estos vecinos.

La empresa adjudicataria ha avanzado todos los trabajos posibles en los terrenos que tenía a disposición, concretamente en el tramo que discurre desde El Chorrillo hasta Hoya Fría, y esta zona se encuentra sólo a falta del asfaltado, que se practicará cuando toda la vía esté construida.

A partir del desbloqueo de las expropiaciones de la zona militar, de la entrega por parte del ayuntamiento de los terrenos de Las Moraditas de Taco y del acuerdo ya alcanzado con el Hospital Nuestra Señora de La Candelaria para la ejecución de las obras sobre el aparcamiento, los trabajos se desarrollarán con toda celeridad para dar cumplimiento a los plazos.

Las obras de la segunda fase están adjudicadas a la UTE Satocan y SA-FCC Construcción SA, y suponen una inversión de 13,9 millones de euros. El plazo de ejecución es de 24 meses. Esta vía pretende desahogar el tráfico entre ambas autopistas con una conexión semidirecta, dotando de conectividad a los barrios.