La organización de consumidores FACUA ha denunciado hoy que Iberia ha tardado cuatro años en pagar una compensación por la cancelación de un vuelo tras "falsear los motivos", ya que el avión sufrió una avería pero la aerolínea atribuyó la cancelación a la congestión del espacio aéreo.

En un comunicado, FACUA ha señalado que el Ministerio de Fomento dio por buena la excusa de la compañía sin pedir a AENA que la corroborara.

Una pareja afectada por esta cancelación denunció ante Fomento que la compañía se inventó que el vuelo IB1129 Sevilla-Barcelona del 19 de agosto de 2006 no despegó por "la congestión del espacio aéreo existente en la zona", cuando en realidad sufrió la avería del motor, como había publicado la prensa local.

Según FACUA, Iberia tardó nueve meses en dar una respuesta a Fomento, en la que siguió mintiendo sobre las causas de la cancelación y la Dirección General de Aviación Civil del Ministerio desestimó la reclamación dando por buena la excusa de la compañía, "sin tan siquiera pedir a la autoridad aeroportuaria, AENA, que confirmara el dato", por lo que el caso acabó en el Defensor del Pueblo.

FACUA y los afectados llevan más de un año esperando que la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) aclare si se ha sancionado a Iberia por estas irregularidades, agrega el comunicado, en el que subraya que resulta frecuente que determinadas compañías aéreas falseen datos para eludir su obligación de abonar compensaciones económicas a los afectados por cancelaciones o grandes retrasos.

Tras reiterados requerimientos al organismo competente del Ministerio de Fomento en materia de navegación aérea, en mayo de 2008 envió a FACUA una resolución "plagada de errores" por la que archivaba la reclamación.

Ante el recurso presentado por la organización, Iberia ha abonado finalmente a los dos pasajeros las indemnizaciones de 250 euros que fija el Reglamento (CE) 261/2004 del Parlamento Europeo y del Consejo de 11 de febrero antes cancelaciones y grandes retrasos en vuelos que no superen los 1.500 kilómetros.

Agrega que posiblemente los dos socios de FACUA son los únicos pasajeros del vuelo IB1129 que han recibido las compensaciones que fija la normativa europea y destaca que Iberia también incumplió su obligación de informar a los pasajeros, a los que reubicó en otro vuelo con seis horas de retraso, de su derecho a ser compensados.