El Ministerio de Justicia puso ayer en funcionamiento un nuevo servicio electrónico que permite a los ciudadanos obtener certificados de antecedentes penales, actos de última voluntad y contratos de seguro de cobertura de fallecimiento, a través de internet y en un plazo máximo de tres días. El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, presentó en la sede de su departamento este sistema al que los usuarios podrán acceder, mediante el uso del DNI electrónico, a través de la página web www.mjusticia.es.
Según destacó, las nuevas tecnologías permitirán agilizar trámites, ahorrar costes de desplazamiento y tiempos de espera. "Estos certificados se exigen en numerosísimos trámites y circunstancias de la vida, para una declaración de últimas voluntades, para reclamar una indemnización o en una solicitud de trabajo", continuó el ministro, quien se felicitó de que ya se pueden pedir estos documentos por vía telemática, "sin salir de casa y mediante un click".".
"Es habitual comprar en internet entradas para ir a un concierto o al cine, billetes de avión o realizar la declaración de la renta", prosiguió Caamaño, quien puso de relieve el "empeño modernizador" de su departamento para responder a las exigencias de una sociedad "tecnológicamente avanzada".
Además, Caamaño anunció que los ciudadanos dejarán de hacer cola en el Registro Civil y podrán solicitar los certificados de nacimiento, matrimonio y defunción por vía telemática.
Este proyecto se pondrá en marcha en los próximos meses y, en cualquier caso, antes de que entre en vigor la ley de Uso de las Tecnologías en la Administración de Justicia.
Según avanzó, un nuevo sistema de subastas judiciales se pondrá en marcha en internet a lo largo de este año.
"También estará muy avanzado y concluido el proyecto para que la famosa apostilla de La Haya que hay que incluir en algunos documentos públicos pueda hacerse por vía electrónica", añadió, refiriéndose a la anotación que reconoce la eficacia jurídica de los documentos públicos expedidos en los países firmantes del Convenio de La Haya.