La Policía Nacional ha detenido a cuatro responsables y trabajadores de una chatarrería de Leganés (Madrid) que olvidaron desactivar una trampa anti-ladrones casera que hacía disparar una escopeta y que solían utilizar por las noches para evitar robos, y que acabó hiriendo a un cliente.

Según ha informado hoy la Jefatura Superior de Policía de Madrid, el suceso ocurrió el pasado jueves y los arrestados están acusados de tentativa de homicidio y tenencia ilícita de armas.

Uno de los trabajadores había ideado un artilugio compuesto por una escopeta que disparaba al activarse un mecanismo hecho con hilos si alguien intentaba entrar al negocio un vez cerrado.

Los responsables de la chatarrería solían activar esta trampa por la noche para evitar robos y la desactivaban por la mañana, pero el pasado jueves no la quitaron y se accionó cuando un cliente entró en el local, hiriéndole en la pierna.

Los hechos ocurrieron sobre las nueve y media de la mañana y al llegar al lugar los agentes encontraron a la víctima con una herida por arma de fuego en la pierna que le había provocado rotura de huesos, por lo que fue trasladado a un centro sanitario.

La Policía detuvo en ese momento a los tres responsables de la chatarrería -M.G.B, L.G.D, y M.G.D- y comenzó a buscar a un trabajador que, según los testimonios recabados entre varios testigos, había creado el artilugio y que había huido con él en bicicleta tras el suceso.

Dos horas más tarde encontraron a I.A.P.C., que llevaba un cartucho de escopeta en el bolsillo pero no tenía el arma, que sigue siendo buscada.