La romería de San Antonio Abad de Güímar cobró realce ayer con las ferias de ganado y artesanía, además del mercado del agricultor, que ofrecían al público unos atractivos añadidos a la celebración de la tradicional fiesta anual, que se retrasó una semana por el mal tiempo.

La plaza del ayuntamiento y las calles adyacentes estaban ayer repletas de público que salió a la calle para acompañar al patrón de los animales domésticos. La muestra de animales exponía diversos tipos de aves, tanto de granja, como de colección, de deporte o de compañía. En la zona denominada "Pequeño San Antonio" se podían contemplar crías de los animales de granja más frecuentes.

A las 12:00 horas comenzó la celebración litúrgica en honor de San Antonio Abad, en la parroquia de Santo Domingo de Guzmán, cuya parte musical corrió a cargo de la Agrupación Músico Instrumental Amigos del Arte de Güímar. Posteriormente, mientras la imagen del santo salía del templo, tuvo lugar el desfile a caballo por delante del sacerdote.

Las parrandas animaron la procesión del patrón, una talla de José Rodríguez de la Oliva que muestra a un anciano de barba blanca y rostro sereno lleno de ternura, con hábito monacal, que lleva en una mano el libro de la regla y en la otra un bastón rematado con un símbolo egipcio de espantar a los demonios, según la costumbre de su país natal, Egipto.