Canarias es de las comunidades autónomas españolas que más "suspenden" en eficiencia del gasto educativo, al obtener 23 puntos sobre 100 en esta materia, donde solo registran peores resultados Castilla-La Mancha y Baleares, según un estudio de la organización Profesionales Por la Ética, presentado ayer.

Castilla y León, País Vasco, Navarra y Madrid obtienen más de 50 puntos sobre 100 en eficiencia de la inversión pública en enseñanza no universitaria, mientras que las trece regiones restantes quedan por debajo.

La evaluación compara el gasto anual por alumno con las tasas de escolarización, graduación, idoneidad (relación entre edad del estudiante y curso matriculado) y abandono educativo, además de la disponibilidad de profesorado y recursos complementarios como ordenadores.

El informe dibuja también un "ránking de excelencia educativa" basado en los indicadores citados y algún otro, que encabezan País Vasco, Navarra, Castilla y León y Asturias y cierran Andalucía, Castilla-La Mancha, Baleares y Canarias.

Los datos analizados corresponden mayoritariamente al curso 2008-2009 y proceden de las estadísticas publicadas por el Ministerio de Educación, INE, OCDE y Eurostat.

Sobre el gasto educativo, el coordinador del estudio, Miguel Gómez de Agüero, precisó que no se trata sólo de gastar más, sino de gestionar bien los recursos y seguir una política educativa coherente en el tiempo.

Ha citado a Castilla y León y Baleares, con un gasto educativo por alumno parecido (6.000 y 5.700 euros), según explicó, pero que ocupan los dos extremos de la tabla.

Gómez de Agüero señaló también el caso de Madrid por su "bajo nivel" de gasto no universitario (1,8 por ciento del PIB), pero que figura en los primeros puestos en eficiencia.

"Seguramente, tiene mucho que ver", argumentó, con que cerca del 50% del alumnado de esta comunidad asiste a centros de iniciativa social (mayoritariamente privados concertados), mientras que son el 25% en Andalucía.

Esto supone un coste "mucho menor" para la administración pública madrileña, sin ánimo de competir ni enfrentar los dos tipos de escuela, sino hacerlas "complementarias", opinó.

Entre otros datos parciales aportados en la presentación, los que se gradúan en ESO a los 16 años (2008) están entre el 87,1% de Asturias y el 59,7% de Baleares. El abandono prematuro varía entre el 16% del País Vasco y el 40,8% de Baleares.

Gómez de Agüero advirtió de que la falta de graduados en secundaria postobligatoria supondrá una falta de competitividad a medio plazo.

A su vez, el psicopedagogo Ramón Novella defendió un pacto nacional por la excelencia y la estabilidad entre todos los agentes educativos y las administraciones. "Uno de los factores que ha influido negativamente -dijo- en la educación ha sido el cambio tan frecuente de las diferentes políticas educativas", no fundamentado tanto en criterios educativos y pedagógicos como ideológicos o "demasiado partidistas".