La detención del exgeneral serbobosnio Ratko Mladic va a permitir que se haga justicia por los crímenes de los que le acusa la justicia internacional, afirmó hoy el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen.

Mladic "desempeñó un papel clave en algunos de los episodios más oscuros de la historia balcánica y Europea, incluyendo el asedio de Sarajevo y la matanza de miles de hombres y jóvenes bosnios en Srebrenica", recordó Rasmussen en un comunicado.

El responsable de la Alianza Atlántica señaló por ello su satisfacción por el anuncio de la detención de Mladic y de que su extradición al Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) está en marcha.

"Tras casi dieciséis años después de su acusación por genocidio y otros crímenes de guerra, su detención ofrece finalmente una oportunidad para que se haga justicia", subrayó el político danés.

La OTAN envió a Bosnia-Herzegovina a finales de 1995 una fuerza de paz que garantizó la aplicación de los acuerdos de paz de Dayton de 1995, con los que se puso fin a la guerra civil bosnia, que había comenzado en 1992.

La presencia militar internacional actual es mucho menor y está garantizada actualmente por la Unión Europea (operación EUFOR Althea) desde diciembre de 2004.