El Movimiento 20 de Febrero, surgido en Marruecos tras la estela de las protestas para reclamar cambios democráticos en Túnez y Egipto, ha convocado para este viernes en Madrid una manifestación continuación de las protestas que han venido celebrando en los últimos meses en distintas ciudades marroquíes y para denunciar el deterioro de la situación en el país vecino.

Según han informado en un comunicado, la manifestación arrancará a las 11:00 horas del Consulado de Marruecos en Madrid, en la calle Leizarán número 31, y culminará en la Embajada marroquí, situada en la calle Serrano número 179.

El objetivo de la protesta, explican desde el Movimiento 20 de Febrero, es exigir "un cambio real a la altura de las expectativas de los ciudadanos marroquíes dentro y fuera del país" así como un "cambio radical en la política administrativa de la Embajada y los consulados de Marruecos en España".

Igualmente reclaman que se eliminen "los costes administrativos", que consideran "inasequibles para la mayoría de los ciudadanos marroquíes" y que se ponga "fin al amiguismo, la corrupción y el clientelismo en el Consulado". También quieren que se luche contra la corrupción y se persigan los casos que se detecten y que se defiendan "los derechos de los ciudadanos marroquíes inmigrantes frente a las autoridades españolas".

Asimismo, reclaman que se faciliten los procedimientos administrativos en puertos y aeropuertos y que se creen "nuevas extensiones del consulado para que la gestión administrativa sea real y eficaz para los ciudadanos, especialmente en zonas alejadas de Madrid".

El pasado domingo, decenas de personas habían resultado heridas por la carga policial contra los miles de manifestantes congregados en el centro de Casablanca para exigir reformas al régimen, según informó el Movimiento 20 de Febrero.

Los policías emplearon porras y otro material antidisturbios para dispersar a los aproximadamente 15.000 manifestantes concentrados en el barrio de Sbata de Casablanca a pesar de que, según informaron las autoridades, el acto no había sido debidamente autorizado.

Un miembro del Movimiento 20 de Febrero, Munaim Uihi, explicó entonces que el objetivo de la protesta era demandar más libertades democráticas, empleo y mejores condiciones sociales de forma pacífica.