El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, tachó hoy de "lenta" la respuesta de la Comisión Europea (CE) en la denominada "crisis del pepino", al tiempo que aseguró que su Ejecutivo va a pedir "explicaciones muy contundentes" y "reparaciones suficientes".

Zapatero afirmó que la CE tenía que haber reaccionado "con más contundencia y rapidez" una vez que las autoridades de Hamburgo descartaron que la infección por una variante de la bacteria "E.coli" que ha causado varias muertes en Alemania fuera consecuencia de los pepinos españoles.

En una entrevista con Radio Nacional de España (RNE), el jefe del Gobierno español lamentó, además, que Bruselas no haya defendido con más claridad "las reglas del juego" fronterizas en la UE.

El objetivo ahora de su Ejecutivo, añadió, es "exigir la reparación del daño causado", que es "grave", y hacerlo ante las instancias que proceda jurídicamente, aunque no aclaró si serán las autoridades europeas o alemanas.

La tarea es "muy muy ambiciosa", porque hay que recuperar cuanto antes el buen nombre de los productos hortofrutícolas españoles, que "tienen una excelente calidad y son muy competitivos", y la normalidad en su comercialización, agregó Zapatero, que censuró también la actitud de las autoridades alemanas en esta crisis.

El líder socialista defendió la actuación de su Gobierno, que, a su juicio, ha actuado con "celeridad" y "con la suficiente prudencia y contundencia", al tiempo que calificó de "completa y radicalmente injustas" las críticas del opositor Partido Popular (PP) a su gestión.

"Hemos actuado como se debe de actuar y vamos a conseguir la reparación" necesaria, subrayó tras hacer hincapié en que la alerta sobre los pepinos se ha levantado en sólo una semana, el tiempo necesario para concluir los análisis.

"El daño producido es fuerte, grave, pero vamos a poner todos los medios para restaurar" la confianza en los productos españoles, reiteró.

La CE levantó este miércoles la alerta sanitaria decretada el pasado jueves contra los pepinos españoles y comunicó oficialmente que todas las analíticas de suelo, agua y hortalizas que se han realizado de la explotación de Almería (sur español) que estaba bajo sospecha están libres de la bacteria "E.coli enterohemorrágica".

La decisión era muy esperada en España, donde ayer responsables del Gobierno español y de la región de Andalucía se reunieron en Almería con representantes del sector hortofrutícola.

La alerta ha supuesto la paralización de la venta de productos hortofrutícolas españoles en varios países.