El órgano ejecutivo de la Unión dio ayer luz verde a la intervención de la Caja Mediterráneo (CAM) por parte del Banco de España, al considerar que no plantea problemas a la libre competencia. La operación fue anunciada el pasado viernes e incluye una línea de crédito de 3.000 millones de euros para dotar a la entidad de liquidez y una inyección de 2.800 millones que contribuirán a su capitalización a través de la compra de acciones.

En la práctica, el Estado pasará a controlar entre un 80 y un 85% del capital de la CAM.

El Ejecutivo de la UE recuerda que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), dentro del cual se enmarca la operación, fue establecido durante la crisis para apoyar la consolidación del sector bancario español y la reestructuración ordenada de las entidades de crédito.

"La Comisión considera que el paquete de rescate para la CAM está en línea con sus directrices de ayudas de estado a bancos para hacer frente a la crisis financiera", indicó la CE en un comunicado. La CE subraya que las medidas españolas son "limitadas en el tiempo", y que España se ha comprometido a remitir un plan de reestructuración de la entidad en los próximos seis meses.

Total normalidad

"Por lo tanto pueden considerarse un medio apropiado para remediar la seria alteración de la economía española y compatibles con el mercado interior", añadió.

La CAM es la tercera entidad española intervenida desde que estalló la crisis financiera, después de Caja Castilla la Mancha en marzo de 2009 y de Cajasur en mayo del año pasado.

Las oficinas de la CAM registraron ayer una jornada caracterizada por la "total normalidad" en su primer día de apertura al público tras la intervención de la entidad por parte del Banco de España el pasado viernes, según confirmaron fuentes de la entidad bancaria. La red de sucursales recibió la afluencia usual de público, sin incidencias entre los clientes que acudieron a realizar sus operaciones habituales, según las mismas fuentes.

El Estado se ha convertido de manera temporal en accionista de Meliá Hotels, ya que la CAM poseía el 6,007% del capital del grupo turístico.

El sindicato SICAM apuntó ayer que los nuevos gestores "esperan" que en septiembre esté finalizado el proceso de la "puesta en valor" de la caja, para luego empezar a buscar un posible socio que pueda hacerse cargo de ella.