El PP tinerfeño tiene motivos sobrantes para estar eufórico y el PSOE, deprimido. Por primera vez desde las elecciones de 1977 y 1979, cuando la UCD de Adolfo Suárez tenía especial arraigo en la Isla, un partido logró el pasado domingo vencer en todos los municipios tinerfeños. Un salto espectacular que resulta especialmente chocante en las tres localidades en las que los conservadores no tienen, ni siquiera, un concejal en la actualidad (Vilaflor, Los Silos y Fasnia), donde, además, su triunfo es muy holgado respecto a los socialistas. Pero también llama poderosamente la atención su victoria, por ejemplo, en feudos del PSC tan fuertes e históricos como La Matanza de Acentejo, en el que su alcalde, Ignacio Rodríguez, volvió a ser el mandatario local más votado de toda Canarias con un punto más que en 2007 (alcanzando un 73%) y en plena crisis económica.

Estos datos dejan bien clara la dimensión de la aplastante ola conservadora en España y, también, en Tenerife. Y eso que, respecto a la UCD del 77 y del 79, la diferencia en el porcentaje de votos es mucho mayor en favor de la coalición que juntó (o maljuntó, si se tiene perspectiva histórica por su desintegración posterior) Suárez. De hecho, en el 77, UCD logró el 53,23% de lo sufragios en la Isla y, dos años después, el 56,78%, lo que contrasta con el 44,85% alcanzado ahora por el PP. Eso sí, un resultado sin precedentes para esta fuerza, arrollador en los principales municipios y muy superior al 40,9% obtenido en Tenerife por el PSOE en su mejor año a escala nacional (1982), cuando en la Isla obtuvo 4 diputados, su récord, igualado por el PP en esta ocasión.

Es más, en esos comicios del 28 de octubre y pese a su desmembración, UCD siguió ganando en San Miguel (un 38,9 frente al 37,85 socialista), en Garachico (un 39,66 por un 31,65), Icod (un 35,1%), Santiago del Teide (46%, municipio en el que la segunda fuerza fue AP), El Tanque (con un destacable 67,17%), Tegueste (un 33,67, y también con AP en segundo lugar) y La Victoria (38,4 para UCD, 30,99 para AP y un 22,22 para el PSOE). Además, en El Sauzal ganó una fuerza nacionalista de izquierdas (UPC), ya extinta, con el 28,36%, frente al 27,37 de la fuerza, entonces muy engrasada, de Felipe González.

En 1986, el PSOE volvió a ganar en la Isla con el 39,84%, por el 18,38% de las AIC, el 18,04 de AP y el 12,27 del CDS de Suárez. Sin embargo, una victoria tan clara no le dio 4, sino 3 diputados, por uno de esas otras tres fuerzas. En este caso, tampoco el mismo partido ganó en todos los municipios y, aunque los socialistas vencieron con holgura en la mayoría, cedieron ante AP y el CDS en Tegueste o AIC en Candelaria y El Sauzal.

En el 89, y pese a la subida del PSOE hasta el 40,65%, tampoco quedó dibujado el mapa del domingo y ni siquiera la mayoría absoluta del PP de 2000 deparó un resultado tan claro y abrumador en todos los municipios, ya que superó al PSOE en un diputado (3 a 2) y no venció en diversas localidades. Y mucho menos en convocatorias más igualadas, como las de 1993, 1996, 2004 y 2008.

Ni siquiera el arraigo de CC en municipios como La Orotava, Arona, La Guancha o Garachico impidió el "maremoto" azul que, de tener continuidad con independencia de las lecturas y coyunturas nacionales, podría variar bastante el panorama electoral municipal de la Isla en 2015, si bien aún queda mucho para eso.