La Ejecutiva Federal del PSOE acordó ayer abrir la carrera para renovar tanto la dirección del partido como su proyecto político en un congreso federal ordinario que se celebrará, previsiblemente, en la primera semana de febrero, tras el varapalo registrado en las elecciones generales del domingo.

El secretario general del PSOE y presidente en funciones del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, compareció ante los medios de comunicación después de la reunión de la Ejecutiva para anunciar que el Comité Federal se reunirá el sábado para decidir la fecha concreta del congreso.

"Es lo que procede, es lo que corresponde, que el PSOE afronte una nueva etapa, que la democracia y los compañeros diseñen el proyecto para el futuro de los próximos años y que lo hagan como siempre en el PSOE, con toda la libertad y con todo el sentido de la responsabilidad", manifestó Zapatero sin pronunciarse sobre posibles candidatos.

El aspirante socialista a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, no dio ayer la cara ante los periodistas y quien podría ser su adversaria por el liderazgo del partido, Carme Chacón, dijo antes de comenzar la reunión que "es tiempo de hacer juntos una reflexión profunda, tiempo de responsabilidad y tiempo de unidad".

Zapatero insistió en que la decisión sobre su sucesor corresponde a los militantes y señaló que ningún miembro de la Ejecutiva - tomaron la palabra los 37- pidió su dimisión como secretario general.

Tras dejar claro que su relación con Rubalcaba es "estupenda" y "excelente", consideró que convocar un congreso extraordinario sería un "sinsentido", ya que se limitaría a renovar la dirección, y en este caso los socialistas quieren debatir el proyecto político.

La Ejecutiva, según Zapatero, coincidió de manera unánime con el análisis efectuado por Rubalcaba en la noche electoral: los resultados son malos y el PSOE ha sufrido "un fuerte deterioro en su respaldo popular".

Con "el viento en contra"

Pero "teníamos todo el viento en contra", recalcó al recordar que los comicios se han celebrado en circunstancias "muy especiales", en plena crisis económica y con "muy preocupantes tensiones" en los mercados financieros.

"Hay momentos en la vida política" en los que un Gobierno "procura poner los intereses generales por encima de los que puedan ser los de partido". "Así lo hemos hecho en esta legislatura", remató.

En este contexto, garantizó que su deseo para España, al margen de los resultados que ha obtenido el PSOE, es que "las cosas vayan bien, que mejoren": "Los ciudadanos en democracia siempre aciertan", apostilló.

Tras asumir su responsabilidad, Zapatero agradeció el esfuerzo realizado por todo el partido y en especial por Rubalcaba para lograr el respaldo de casi siete millones de votantes y ha asegurado que "en absoluto" se siente injustamente tratado por sus compañeros por su forma de gestionar la crisis. De hecho, afirmó que ha contado con su "apoyo incondicional en las etapas fáciles y en las muy difíciles".

Consciente de la complicada situación económica y de que los ojos de los mercados siguen sobre España, garantizó al PP la "máxima colaboración" del Gobierno en funciones durante las próximas semanas, aseguró que actuará con "sentido de la responsabilidad" y se mostró convencido de que no habrá "el más mínimo problema".

Según explicó, los tiempos están "tasados" por la ley y no se puede acelerar el proceso de traspaso de poderes, pero el diálogo con el PP será "máximo".

Fuentes de la Ejecutiva Federal consultadas aseguraron que la dirección del partido cerró filas con Rubalcaba, que no recibió más que elogios por su esfuerzo y su entrega durante la precampaña y la campaña electoral, pese a la derrota, de la que nadie le ha culpado.

Rubalcaba calla

Rubalcaba no ha desvelado todavía sus intenciones sobre su futuro político. Si su deseo es renunciar a liderar la oposición y, por ende, el partido, las fuentes consultadas creen que podría hacer pública su decisión en los próximos días.

Un dirigente socialista consultado, sin embargo, se mostró completamente seguro de que será Rubalcaba quien debata con Rajoy en la investidura. "Y más adelante, también", zanjó.

Más enigmático fue el expresidente de Castilla-La Mancha José María Barreda, quien se limitó a contestar: "Hoy -ayer para el lector- es el comienzo del regreso al futuro". Para Barreda, la reunión fue muy útil y muy apasionante, pero de ella no se puede deducir nada de eventuales candidatos.

la reacción

Rubalcaba no come con Zapatero

El presidente del Gobierno en funciones y secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, abandonó ayer la sede de su partido tras almorzar con parte de la Ejecutiva socialista, en su mayoría miembros del Comité Electoral de Alfredo Pérez Rubalcaba, pero sin el candidato. Según fuentes del PSOE, Rubalcaba había comunicado de antemano que tenía un compromiso previo que le impediría asistir al almuerzo en una jornada en la que no hizo ninguna aparición pública tras su derrota.

el futuro

Una sucesión sin candidato oficial

La decisión del PSOE de celebrar en febrero un congreso ordinario para renovar la dirección del partido abre el debate sobre la sucesión de José Luis Rodríguez Zapatero, una carrera en la que no hay ningún candidato oficial y, por el momento, tampoco oficiosos. Entre los nombres más comentados en la sede del PSOE en la madrileña calle de Ferraz está el del candidato a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, que guarda silencio, y el de la ministra en funciones de Defensa, Carme Chacón, que tampoco ha revelado sus planes.

RUBALCABA

Valenciano apoya al candidato

La directora de campaña del PSOE, Elena Valenciano, aseguró ayer que ve a Alfredo Pérez Rubalcaba "con fuerza", pero subrayó que el partido está "en un periodo de reflexión", de manera que "no hay ninguna decisión" sobre si el candidato a las elecciones aspirará a ser secretario general del PSOE. "Con fuerza sí, se ha demostrado que Rubalcaba fuerza tiene, en la campaña nos ha dejado a todos atrás", dijo en una entrevista en Onda Cero, preguntada sobre si ve a Rubalcaba con fuerza para seguir.

el relevo

Más respaldo para Rubalcaba

El alcalde de Lugo, el socialista Xosé López Orozco, defendió ayer que el candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, "podría ser un buen candidato" para ocupar la Secretaría General de este partido. En alusión al congreso ordinario que el PSOE celebrará el próximo mes de febrero, señaló que "el actual secretario general no va a ser secretario general" y, tras la derrota de su partido, hace falta "una buena dirección para esta etapa de oposición que toca vivir".