La Despensa, una asociación canaria sin ánimo de lucro dedicada en exclusiva al reparto de alimentos entre los colectivos necesitados y familias de toda la Isla, ha advertido de que no puede asumir el trabajo de entrega que lleva realizando desde el ejercicio 2009, debido a la incapacidad de poder hacerse cargo de los gastos que genera el mantenimiento de su sede ubicada en la Subida de El Tablero, número 42, edificio Viso. En este sentido, la falta de las ayudas por parte de las administraciones para sostener las infraestructuras de acopio de alimentos ha hecho que sus dirigentes, José Luis Gutiérrez y su hijo Óscar, tengan la intención de cerrar la puerta de un proyecto de ayuda al necesitado o sin recursos.

En este sentido, José Luis lo dice claro: "Para las administraciones no existimos, pero no existimos y en cambio los ayuntamientos nos siguen derivando familias y otras ONG para que les repartamos alimentos. Es lamentable que siempre que hemos estado en contacto con los políticos nos valoren el trabajo que hacemos, nos invitan a seguir trabajando y nos derivan personas y familias con muchísimos problemas para comer. En cambio no aportan nada para seguir sosteniendo el alquiler, por ejemplo, de nuestra sede", criticó.

Recordó que La Despensa lleva entregados a familias y colectivos diversos, entre enero y septiembre de este año, nada menos que 51.548 kilos de alimentos, de los que 29.570 kilos eran no perecederos, 17.856 fueron entregados directamente a familias y 4.698 kilos fueron repartidos a través de una línea de ayuda puntual y de emergencias.

Óscar explicó al respecto que el destino "de todos estos alimentos está más que contrastado porque cada uno de los géneros entregado está debidamente justificado, firmado y sellado. El control es importantísimo porque, además, La Despensa es la única ONG de Canarias autorizada por el Ministerio de Hacienda por la que las empresas pueden desgravar. Está fiscalmente sometida, por lo que no tenemos nada que esconder", aseguró con rotundidad.

Reconoció que la situación es bastante mala, pero aseguró que "estamos haciendo una labor que les correspondería a las administraciones. Nosotros queremos seguir ejerciéndola, pero son los ayuntamientos los que no nos ayudan con las infraestructuras. Necesitamos un sitio para seguir ejerciendo esta labor altruista. Todo el mantenimiento del local lo estamos llevando nosotros, de nuestro bolsillo salen todos los gastos de mantenimiento y sólo pedimos una ayuda al Ayuntamiento de Santa Cruz o el de La Laguna, que son los que más nos derivan personas y colectivos que también son ONG".

José Luis, en cambio, indicó que La Despensa atiende a más de 700 familias al mes, "puede ver los documentos de entrega, porque todo tiene que estar registrado", pero al margen de ello colabora con asilos, casas de acogida, asociaciones y distintas fundaciones, entre las que se encuentran las Hermanas Bethlemitas, Casa de Acogida Madre del Redentor, Iglesia Evangelista, Fundación Canaria Hospital de la Inmaculada, Dismonorte, Hogar del Santísimo Cristo de La Laguna, Hermanos de Belén, Hermanitas de Ancianos Desamparados, San José y María, San Lázaro, Hermanos Franciscanos de la Cruz Blanca, Solican, Obra Social La Milagrosa, Fundación Da Silva o la Asociación Española Contra el Cáncer, "entre otras muchas más", apuntó.

Óscar considera que los políticos han engañado abiertamente a La Despensa y que a pesar de las propias peticiones de ayudas que les ha llegado "nosotros hemos estado ahí. Ya nos trató mal el exconcejal de Asuntos Sociales Ignacio González, y el anterior alcalde, Miguel Zerolo, que mucho prometieron y al final nada de nada. Ahora toca a José Manuel Bermúdez, que no nos ha recibido y nos ha derivado al concejal del área, señor Arrocha. Nos sentó, nos escuchó, pero no tomó ni una sola nota. Tenemos la impresión de que han pasado de nosotros".

"Sólo queremos que nos den un local y que asuman su coste porque la labor que estamos haciendo lo merece. Ahora parece que no existimos, pero qué curioso es que sigan derivándonos ONG de ayuda y familias en situación de grave riesgo social", explicó para concluir.