El producto interior bruto de Francia (PIB) creció un 0,3 % en el tercer trimestre respecto al trimestre precedente, cuando se registró un retroceso del 0,1 %, informó hoy el Instituto Nacional de Estadística (Insee).

El avance en el tercer trimestre permitió a la economía gala salir del estancamiento registrado en el segundo trimestre, después de crecer un 0,9 % en los tres primeros meses del año.

Así, en el conjunto de los nueve primeros meses del año, la economía francesa creció un 1,7 % y se situó cerca del 1,75 % de incremento del PIB que el Gobierno había previsto para el conjunto del año.

No obstante, el Insee revisó a la baja la previsión de crecimiento para el cuarto trimestre y la redujo del 0,4 al 0,3 por %, en base a "las informaciones ya disponibles" de estadísticas como el índice de producción industrial.

Entre los pasados junio y septiembre, el consumo de los hogares aumentó un 0,3 %, mientras que las inversiones aumentaron un 0,2 %.

Las importaciones de Francia crecieron un 0,7 % y se situaron casi a la altura de las exportaciones, 0,8 %.

Las mercancías almacenadas de las empresas, por su parte, contribuyeron al dinamismo de la economía francesa con un 0,1 %, agregó el Insee en un comunicado.

Ese organismo señaló además que el aumento de los ingresos brutos disponibles e los hogares desaceleró en el tercer trimestre, pasando del aumento del 1,2 % en el trimestre precedente al 0,4 % actual.