El entrenador del FC Barcelona Intersport, Xavi Pascual, que logró con su equipo el título de la XXII Copa ASOBAL, ha declarado que la apurada victoria por 27-28 ante el anfitrión Reale Ademar la sacaron adelante "por pelotas" después de una final intensa hasta el último segundo.

Pascual, que puede presumir de haber encadenado 23 triunfos consecutivos con el conjunto azulgrana -sin conocer la derrota en Liga y Champions- también ha valorado a su rival de esta noche al que, ha reconocido, que no querría encontrarse en la máxima competición continental "ni en pintura".

El entrenador catalán, que militó durante una temporada en las filas del conjunto leonés, declaró que jugar en un ambiente tan intenso -con lleno en las gradas del palacio municipal con más de 6.000 espectadores- "es una gozada y un lujo para el balonmano".

Sobre la acción de su jugador Siarei Rutenka encarándose con el público tras lograr uno de sus cinco goles en el partido, simplemente señaló que "claramente se equivocó con su comportamiento".

Por su parte, el entrenador del Reale Ademar, Isidoro Martínez, fue más crítico con la labor de los colegiados Sabroso Ramírez y Raluy López pero valoró, por encima de otras cuestiones, "el enorme desgaste y esfuerzo del equipo que ha conducido a un gran espectáculo en una final apasionante".

Martínez fue más explícito al calificar de "pata negra" la enorme igualdad en la final, pese a la diferencia innegable de potencial entre ambos equipos, por lo que no quiso cargar las tintas sobre la última acción del joven Jaime González cuyo lanzamiento precipitado evitó que pudiera llegarse a una prórroga.

"Es un jugador joven que ya empieza a disfrutar de muchos minutos y ante los grandes, por eso no se le puede poner ningún pero, sino simplemente apoyarle y arroparle", concluyó.