Lo que era sorpresa se va convirtiendo en una realidad. El Rosario Estación El Mirador comenzó la temporada sin marcarse grandes objetivos. Con un presupuesto ajustado y un equipo de circunstancias, los de Valle de Guerra están siendo la sensación (al menos hasta la fecha) de la Liga Insular Cabildo de Tenerife de Primera Categoría.

Líderes de la competición y, lo que es mejor, ofreciendo una imagen de equipo seguro y competitivo, los de Valle de Guerra cuentan con un parcial de siete victorias, dos empates (Tijarafe Lavandería Mara y Brisas del Teide) y una sola derrota (frente al Punta Brava en el Puerto de la Cruz).

Los números argumentan de forma manifiesta la buena labor que está realizando tanto la directiva (con Miguel Varela como presidente) así como el mandador Quico González, que está sabiendo exprimir al máximo a cada uno de sus luchadores.

Análisis a tres bandas.- Si bien el grupo en líneas generales está funcionando bien, es justo reconocer la aportación fundamental que están llevando hombres como Aitor Molina o Airam Sosa en las primeras sillas. Especial mención merece el caso de Molina (un sénior), que el año pasado ya hizo una buena campaña en las filas del ya extinto Lumican Santa Cruz, y que está obligando a los destacados A y B rivales a tener que salir a la arena a derribarlo.

De igual forma, en la media, el buen hacer de los destacados B Pedro Gutiérrez (que quiere demostrar que tiene nivel para ser A) e Iván Méndez "El Indio" también está marcando el devenir de las luchadas.

Por último, los puntales C Kiren y Raúl González están mostrándose realmente "intratables" cada uno en su papel. El conejero ejerce de jefe de filas, por lo que Quico González lo reserva para resolver los últimos emparejamientos de los choque, mientras que Raúl tiene la función de emparejar y allanar el camino a su compañero.

Criterios similares.- Tanto Raúl como Kiren González coinciden en que la clave del éxito de los valleros se basa en la unidad y el buen rendimiento tanto de los componentes del vestuario (mandador y luchadores) como la buena sintonía con la directiva.

"Somos una piña. Está claro que para que un equipo consiga buenos resultados es necesario que entre nosotros nos llevemos bien y que, incluso cuando se pierdan luchadas, contemos con el apoyo del mandador y de la directiva", comentó Raúl González.

Por su parte, Kiren González remarcó que "todo el equipo rema para el mismo lado". "Estamos completamente integrados y eso siempre beneficia", dijo.

En cuanto a la actuación individual, el luchador tinerfeño reconoció que le falta "coger más ritmo". "Es curioso pero suelo alcanzar mi mejor estado de forma en la segunda mitad de la temporada. Siempre me pasa", señaló.

Mientras tanto, el conejero indicó que las cosas le están saliendo bien "pero podrían salir mal". "Tengo la suerte de que el equipo responde y sube bastante el marcador, por lo que estoy agarrando con los puntales sin haberme desgastado demasiado", subrayó.

Sobre su compenetración con Raúl González, Kiren explicó que "cada uno sabe el trabajo que tiene que hacer". "Da igual si sale Raúl primero, el objetivo es tirar al hombre fuerte del rival, y si no se consigue, al menos haberlo cansado para que el otro tenga más opciones de dar en tierra con él", dijo.