Los ganaderos de La Palma no encuentran puntos de venta en los que poder dar salida a sus carnes, una situación que se produce por la decisión de los principales supermercados de ofrecer solo "carne refrigerada y de peor calidad", según afirman los afectados, pero con un mayor margen de beneficios, lo que está provocando un alarmante descenso de cabezas de ganado vacuno e incluso el cierre de algunas explotaciones.

Fuentes del sector aseguran que con excepto los supermercados San Martín, que tiene su propia explotación "y completa el resto de su nevera con carne de fuera", las grandes superficies "solo ofrecen en sus carnicerías productos cárnicos foráneos". En concreto, cifran en cerca de 1.300.000 kilos la cantidad de carne que se vende en La Palma en un año, de lo que apenas un 17% procede de explotaciones palmeras.

Los ganaderos afirman que "ni tan siquiera quieren hablar de precios o buscar vías de entendimientos", simplemente "cuando decimos que es carne de La Palma, la rechazan". En este sentido, denuncian que algunas carnicerías "compran apenas una canal o media canal para mantener el cartel de que allí se vende carne de La Palma". Otros establecimientos más pequeños, empresas familiares, sí apuestan decididamente "por la carne de nuestra tierra", destacando la carnicería de San José, en Breña Baja, y la Fuente, en Los Llanos de Aridane, municipio en la que la SAT Ganaderos de La Palma tiene también su propio punto de venta.

Precios excesivos.- Las mismas fuentes informaron de que el precio que el ganadero recibe por su productos se ha mantenido sin incrementar durante los últimos quince años: "Nos pagaban 4,5 euros por kilogramo en canal y luego vendían el solomillo a 30 euros o el entrecot (carne de la región dorsal) a 18. ¿Qué beneficios quieren lograr", se preguntan.

Al ser cuestionados por la capacidad real que tendría la Isla para dar respuesta a la demanda actual, aseguran que "en carne podríamos ser autosuficientes. Tenemos la alimentación, que es lo principal, además de los conocimientos. Y del suelo, ni hablemos. En La Palma hay 11.000 hectáreas de terreno cultivable abandonado, en el que se podría plantar forraje".

Culpa de los ganaderos.- Fuentes de la Consejería Insular de Agricultura confirmaron que "es cierto" que en la mayoría de supermercados no se vende carne producida en la Isla, aunque matizaron que "algunos ganaderos, no todos, también tienen su parte de responsabilidad. No se puede pretender vender como carne de primera calidad la que se saca de animales que están siendo utilizados durante años para el arrastre, logrando con ello subvenciones. Los empresarios quieren vender carne palmera, pero con unos mínimos exigibles", advirtiendo de que "desde el Cabildo se está trabajando para crear una marca única, Carnepal, que cumpla con lo que realmente quiere el consumidor".