El periodista Antonio Alemany ha asegurado hoy que escribió tres discursos para Jaume Matas cuando era ministro de Medio Ambiente, en su declaración durante el juicio que dirime el pago supuestamente encubierto que le hizo el Govern balear por unos 4.500 euros mensuales por las intervenciones públicas del dirigente.

Alemany ha detallado que entre esos discursos para el exministro de José María Aznar realizó el del Plan Hidrológico Nacional, y ha señalado que los facturó al Ministerio de Medio Ambiente.

El periodista ha recordado que ya fue el autor de las intervenciones públicas del antecesor de Matas, el expresidente Gabriel Cañellas, de quien hizo "prácticamente casi todos los discursos de cierta entidad".

Alemany ha negado conocer la naturaleza del concurso público que se cuestiona en esta causa y en el que se encubrió su contratación, y ha afirmado que "nadie", ni durante la instrucción ni durante el juicio, ha dicho que él estuviera presente cuando se preparó ese concurso.

El periodista ha llegado hoy el último a la Audiencia de Palma y a la entrada ha anunciado a los periodistas que "hoy será un gran día".

A lo largo del día de ayer declararon cuatro de los seis acusados, las exjefas de Gabinete de la Presidencia balear María Umbert y Dulce Linares, el ex jefe de Comunicación del Govern, Joan Martorell, y el empresario Miguel Romero. Todos responsabilizaron a Matas de la contratación irregular del periodista Antonio Alemany.

La Fiscalía pide ocho años y medio de cárcel para el expresidente y el periodista que le escribía los discursos, Antonio Alemany, y les acusa de malversación de caudales públicos, falsedad en documento oficial, prevaricación, tráfico de influencias y fraude a la Administración.

En esta pieza, una de las 26 en las que se divide el caso Palma Arena, se investiga el pago supuestamente encubierto del Govern balear a Alemany de unos 4.500 euros mensuales por escribir los discursos de Matas.

También se dilucida la legalidad de una subvención de 450.000 euros que recibió del Ejecutivo el periodista para poner en marcha una agencia de noticias y un contrato de 11.500 euros por elaborar unos reportajes deportivos que supuestamente no hizo.