El Cabildo de Tenerife rindió ayer lunes un homenaje al militar tinerfeño Antonio de Benavides Bazán y Molina coincidiendo con el 250 aniversario de su fallecimiento.

La corporación insular realizó una ofrenda floral en la tumba del teniente general cuyos restos se encuentran localizados en la Iglesia Matriz de la Concepción de Santa Cruz de Tenerife, y organizó una conferencia a cargo del general y presidente de la Tertulia Amigos del 25 de julio, Emilio Abad, en la que también estuvieron presentes el presidente del Cabildo, Ricardo Melchior, y el director insular de Cultura y Patrimonio Histórico, Cristóbal de la Rosa.

Ricardo Melchior destacó la importancia de que todos los tinerfeños conozcan la historia del general Benavides. "Fue una persona extraordinaria, que tuvo un papel clave en la historia de España debido a su actuación en la batalla de Villaviciosa, donde le salvó la vida al rey Felipe V. A pesar de ello, se caracterizó por su humildad y sencillez a lo largo de su vida y supo conciliar todas sus facetas, teniendo una tremenda influencia en la llegada de los canarios a lugares como La Florida", comentó.

El presidente insular insistió en sus cualidades personales marcadas por la solidaridad y ayuda al prójimo, que le llevaron, por decisión propia, "a vivir sus últimos años el Antiguo Hospital Nuestra Señora de los Desamparados junto a las personas sin recursos".

El general de brigada de artillería retirado y presidente de la Tertulia Amigos del 25 de Julio, Emilio Abad, hizo un recorrido por la vida de Antonio de Benavides, del que destacó que era un hombre "sencillo y humilde" que por avatares del destino, tuvo un papel "fundamental" en la historia de España al salvarle la vida al rey Felipe V.

Concretamente, fue en 1710 en la batalla de Villaviciosa, donde cambió la montura con el Rey, al estimar que el caballo blanco del Monarca era un blanco más fácil para los enemigos. Felipe V salvó su vida y Antonio Benavides resultó herido de gravedad. Finalizado el combate, y en la misma de operaciones, el militar tinerfeño, recibió el título de brigadier de Caballería.

RESTAURACIÓN DE LA LÁPIDA

El Cabildo restauró recientemente la lápida de los restos del teniente general tinerfeño, que se encuentra localizada en la entrada principal del templo santacrucero, como fue expreso deseo en su momento de Benavides.

Esta intervención se realizó debido a que estaba partida y se aprovechó también para acometer trabajos de limpieza y reparación. El texto, que se ha mantenido intacto en estos 250 años, recoge la siguiente grabación: "Aquí yace el Excmo. Sr. D. Antonio Benavides, teniente general de los Reales Ejércitos, natural de esta isla de Tenerife. Varón de tanta virtud, cuanto cabe por arte y naturaleza en la condición mortal".