El Banco Central Europeo (BCE) mantendrá mañana jueves los tipos de interés en el 1 %, pero podría bajarlos más a lo largo del año por la debilidad coyuntural y la crisis de endeudamiento, según el consenso de los analistas.

Los mercados descuentan que el BCE dejará mañana inalterada su tasa rectora de refinanciación, pero algunos economistas contemplan la posibilidad de que la reduzca hasta el 0,5 % los próximos meses.

Hasta ahora el 1 % es el nivel mínimo histórico al que el BCE ha bajado el precio del dinero y parece inviable reducirlo más.

La agencia de calificación crediticia Fitch consideró que el BCE debe intervenir más para solucionar la crisis de deuda soberana de la zona del euro.

El director de calificaciones de deuda soberana de Fitch, David Riley, opinó que el BCE tiene margen para aumentar su balance (en referencia a la compra de deuda) sin que aumente la inflación.

Riley señaló que hasta ahora las medidas adoptadas para afrontar la crisis de deuda soberana no han sido muy efectivas.

El BCE ha llevado a cabo operaciones de refinanciación a largo plazo, la última a tres años, que de momento los bancos no han utilizado para dar créditos a los hogares y las empresas.

La entidad monetaria europea prestó a finales de diciembre a 523 bancos casi 489.190 millones de euros.

Desde entonces los depósitos a un día de los bancos en el BCE se han disparado hasta encadenar varios valores récord en las últimas jornadas.

Los depósitos a un día en el BCE alcanzaron el 10 de enero el máximo histórico de 485.898 millones de euros pese a que la entidad monetaria sólo remunera el dinero a un 0,25 % y el Eonia, el interés interbancario a un día, se situó ayer en el 0,371 %.

Fitch apostilla que "el actual incremento de los depósitos en el BCE es consistente con la creación de fondos para reemplazar la deuda que vence".

Los expertos del banco italiano UniCredit consideran que "no es difícil de entender por qué los bancos mantienen la aversión al riesgo y prefieren acumular liquidez ya que no se han resuelto las incertidumbres sobre la deuda soberana y los bancos afrontan elevados vencimientos de bonos en los primeros meses del año".