El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad ha garantizado la asistencia a las mujeres que hayan sido implantadas con prótesis mamarias Poly Implant Prothèse (PIP) en consultas privadas que han cerrado o que ya no existen, o que fueron intervenidas fuera de España.

Así lo aseguró ayer la nueva secretaria general de Sanidad, Pilar Farjas, quien subrayó el "compromiso y el esfuerzo" realizado por Sanidad para "garantizar la continuidad asistencial a las mujeres que recibieron el implante objeto de alerta" e insistió en que este departamento se puso a trabajar desde el comienzo con un grupo de expertos.

También valoró la labor realizada con las comunidades autónomas y el Comité de Seguridad de Productos Sanitarios de la UE e incidió en que los resultados hasta el momento permiten llegar al compromiso de que todas las mujeres que han sido implantadas con esta prótesis "fraudulenta" tengan "un centro donde la continuidad asistencial está garantizada".