Unos presupuestos "continuistas", amenazas de reducción de las plantillas de profesorado, falta de diálogo y negociación... La acumulación de estos problemas, entre otros, ha llevado al sindicato docente STEC a hablar de "un mal comienzo de año para la educación pública canaria".

La organización sindical alerta, entre otras cosas, de las posibilidades de que se recorte el número de profesores al restringirse la oferta de empleo y despedirse a trabajadores interinos.

Asimismo, el STEC considera que los presupuestos de la Comunidad Autónoma -que prevén un "irrisorio" aumento de siete millones de euros- "ponen en peligro el derecho a la educación, pues no aseguran los medios necesarios para desarrollarla en óptimas condiciones".

"Después de seis meses al frente de la Consejería de Educación y tras múltiples declaraciones públicas sobre su apuesta por el diálogo y la negociación, el equipo de José Miguel Pérez evidencia una práctica que no respeta estos principios", se queja el sindicato.