Miembros del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron a un hombre de 34 años como supuesto autor de un atraco frustrado con arma blanca en un supermercado de Los Cristianos, en el municipio de Arona. El delincuente, al que le constan diversos antecedentes, agarró a una empleada y le puso un cuchillo en el cuello. La víctima logró zafarse y un testigo, de origen marroquí, le lanzó un carro de compras que provocó que el ladrón cayera y perdiera el arma.

Los hechos ocurrieron a las 16:40 horas de ayer en el establecimiento comercial "Más a Menos", que está situado en la avenida Juan Carlos I, a la altura del complejo residencial Cristimar.

El ahora acusado agarró por detrás a una de las cajeras del comercio y le puso un cuchillo en el cuello, a la vez que el exigió que le diera todo el dinero que hubiera en la caja.

La mujer forcejeó con el atracador y consiguió zafarse del mismo. En ese mismo instante, un ciudadano magrebí le arrebató un carro de compra a otra clienta y lo lanzó con todas sus fuerzas contra el ladrón.

El asaltante acabó en el suelo debido al impacto y, además, perdió el cuchillo. Pero, rápidamente, se levantó y salió del local a toda velocidad.

Al llegar a la calle, intentó subirse en un coche en marcha que supuestamente iba conducido por un cómplice, de origen subsahariano. Sin embargo, este último no paró y escapó del lugar. Ante esa circunstancia, el ladrón debió intentar escapar a pie.

Según el testimonio ofrecido por las víctimas a agentes del Cuerpo Nacional de Policía, ambos individuos habían estado poco antes merodeando de forma sospechosa por el supermercado.

Y, en cualquier caso, las cámaras de seguridad captaron sus movimientos por el establecimiento.

Segundos después, la sala operativa del 112 activó a las fuerzas de seguridad. Y el autor fue localizado y atrapado minutos después por una dotación de agentes de la Brigada de Policía Judicial que acudieron en un coche camuflado. El arresto tuvo lugar antes de que los vehículos radiopatrulla llegaran a las inmediaciones del comercio.

El acusado fue identificado como J.C.A.M., nacido en 1977 y de origen canario. Según fuentes policiales, aseguró a los policías que estaba desesperado y deseaba ingresar en prisión.

Personal de una ambulancia de soporte vital básico del Servicio de Urgencias Canario atendió a la víctima del asalto y a una compañera, de 29 y 31 años, ya que sufrieron una crisis de ansiedad.

Ambas mujeres fueron atendidas en el lugar de los hechos y no fue necesario su traslado hasta un centro sanitario.