Una pescadería de Mungia (Vizcaya) ha instalado en su exterior una máquina dispensadora en la que se puede comprar pescado fresco las 24 horas del día y marisco los fines de semana.

Según ha explicado Marga Ríos, la nueva máquina para comprar pescado fresco ha causado "sorpresa" y ha tenido una acogida "estupenda" entre los vecinos, sobre todo entre la población joven, que la utiliza por la tarde, a la vuelta del trabajo.

En noviembre les ofrecieron instalar esta máquina dispensadora -similar a las que reparten sandwiches o bebidas-, pensando en comida preparada, y se animaron a ofrecer también pescado fresco, una alternativa viable aunque no al margen de ciertos riesgos por el tipo de genero perecedero.

Así, en las baldas se pueden comprar sardinas, anchoas, filetes de merluza, salmón y otros productos del mar, ya limpios y envasados en bandejas individuales, al mismo precio que los que tienen en el interior del establecimiento.

Cada mañana lo compran en el mercado de abastos Mercabilbao, lo envasan y lo ponen en la máquina.

También se pueden comprar productos del mar precocinados, como bacalao al pil pil o chipirones en su tinta, y los fines de semana dispensa distintos tipos de marisco, como gambas, caracollillos, quisquillas, percebes... Todo envasado y con su fecha de caducidad.

El paso siguiente que quieren dar es ofrecer cebo vivo, para los madrugadores pescadores de la costa cercana.

Marga y Rubén han explicado que, hasta donde conocen, no existe en el País Vasco otro establecimiento que utilice esta alternativa de venta de pescado fresco y, rastreando internet, sólo han podido encontrar un sistema similar en Japón.