El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, ha exigido hoy al Ejecutivo que revise el sistema de financiación autonómica porque, con el actual, su comunidad no está recibiendo todo lo que debería del Estado, y si la situación sigue así le será "imposible" mantener los servicios esenciales.
En un encuentro con periodistas en Madrid, Rivero ha señalado que el sistema actual, vigente desde 2009, ha resultado ser "absolutamente injusto", y en el caso de Canarias, esta comunidad recibe 301 euros menos per cápita que la media nacional, que es de 2.012 euros.
Esta menor financiación por parte del Estado se está cubriendo, según ha asegurado, con recursos autonómicos, pero la situación no puede prorrogarse en el tiempo porque, de ser así, será "absolutamente insostenible".
Con esta postura va a acudir el Gobierno canario a la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) de esta tarde.
Rivero ha asegurado estar de acuerdo con que se establezcan techos de gasto y haya criterios de penalización para las comunidades que no los cumplan, como así quiere pretende el Gobierno de Mariano Rajoy.
Sin embargo, ha señalado que no se puede tratar por igual a las comunidades cumplidoras y a las que no lo son a la hora de fijar los límites de endeudamiento.
"Canarias está cumpliendo con los objetivos (de reducción del déficit), y no es razonable que tenga el mismo tratamiento que otras que no cumplen, como la comunidad valenciana, para buscar financiación".
Paulino Rivero ha insistido en que hay un "desequilibrio notorio" entre las comunidades autónomas en cuanto a los servicios esenciales que prestan, cuando todas deberían contar con "las mismas condiciones, la misma calidad y el mismo esfuerzo del Estado" y por eso ha reiterado la necesidad de revisar el actual sistema de financiación.
Dicho sistema, ha recordado, sirve para financiar los servicios esenciales transferidos a las comunidades, y otra cosa es el régimen fiscal de cada una de ellas, que en el caso de Canarias está configurado para compensar la lejanía y la insularidad de esta comunidad, entre otras cuestiones.