El retraso en la finalización de las actuaciones de mejora y embellecimiento que se desarrollan en la zona de Cho Vito mantiene preocupado a los comerciantes de este núcleo de Candelaria.
"La demora en la conclusión de los trabajos nos está causando múltiples perjuicios y comprobamos que los ingresos van descendiendo de forma acelerada, siendo los únicos responsables de la situación los poderes públicos. El Ayuntamiento de la Villa Mariana debería exigir a Costas que acelere los trabajos", comentan comerciantes.
Las actuaciones, "que consisten en la creación de un paseo marítimo y rehabilitación de la playa de Cho Vito, para que sea de arena, deberían haber finalizado el pasado mes de diciembre. Sin embargo, a día de hoy los trabajos continúan y no se observa que éstos vayan a concluir en un plazo corto de tiempo", aseveran indignados empresarios.
"Pocos" trabajadores
De este modo, manifiestan que "el problema deriva de que hay poca gente llevando a cabo las mejoras e incluso hay momentos en que las obras se quedan sin personal, con lo que es normal el retraso acumulado".
"Lo lamentable es que, por si fuera poco, lo que se ha llevado a cabo hasta la fecha tampoco reúne garantías de seguridad. La prueba la tenemos en que en la playa se ha colocado una rampa de acceso y ya se han caído algunos usuarios de este litoral, con el consiguiente perjuicio porque quien se cae ya no regresa" a esta zona costera del municipio, expresan comerciantes.
"No es lógico la pasividad que se está teniendo con las actuaciones y tampoco vemos que ningún político del grupo de gobierno en Candelaria haga nada para resolver la situación por la que estamos atravesando", expresan.
"Si el retraso de la obra que se lleva a cabo en esta zona de la Villa Mariana se sigue prolongando indefinidamente no sabemos qué pasará con el sector comercial radicado en este lugar, más cuando el daño en la caja es cada vez mayor", advierten afectados, quienes afirman que la situación podría provocar el cierre de aquellos establecimientos que no puedan soportar una creciente falta de liquidez.
Señalan que "si las autoridades no estaban convencidas de que las obras acabarían en plazo, hubiera sido mejor haberse estado quieto".
A pesar de que este periódico lo intentó, ayer no fue posible conocer la versión de Costas y del propio gobierno local candelariero.