Alejandro Martínez sigue en su línea de no querer mirar más allá del próximo partido, además de saber diferenciar entre lo que vive el vestuario y lo que pueda opinar el entorno. "Nos quedan dos encuentros antes de disputar la Copa Príncipe -Axarquía y Mallorca- y los profesionales no podemos dedicarnos a pensar ahora en esa final; eso se lo dejamos a la gente del club que ya trabaja para cumplir con la mucha letra pequeña que demanda la FEB y TeleDeporte", indicó el entrenador aurinegro.

Si la victoria en Lugo había acabado con las dudas, fue rotundo: "Las dudas del entorno no las puedo controlar; nosotros no las tenemos porque confiamos en nuestro trabajo. No me meto en lo que dicen los de fuera porque bastante tengo con nuestro quehacer como para tratar de convencer a alguien que no quiere ser convencido. No todos creemos en Dios".

Segunda jornada de la segunda vuelta y de nuevo dos triunfos de diferencia sobre Burgos. "Así es, queda una semana menos para que acabe la fase regular y ahí estamos, con esas dos victorias y un amplio average. Es importante, pero estas cosas no nos garantizan nada. Tenemos que seguir en la misma línea de trabajar, ir mejorando algunos aspectos, como el ser regulares los 40 minutos y no repetir los altibajos que protagonizamos en algunos cuartos. Pese a ello el equipo está arriba, lo que nos ha costado muchísimo. La segunda vuelta será complicada porque todos los equipos, ya sea por arriba, por abajo o por la zona media están buscando algún objetivo y vayas donde vayas el rival saldrá a jugarse algo", manifestó.

Del Clínicas Rincón, rival mañana, dijo: "Como todos los filiales es capaz de lo mejor y de lo peor. En la primera vuelta hicieron un gran trabajo en la primera parte y nos costó muchísimo entrar en el partido. Dominaron el rebote, perdimos muchos balones... Debemos ser sólidos en nuestro campo y no podemos confiarnos por enfrentarnos al colista. Debemos de tener el mismo respeto y ambición en la pista como si nos enfrentáramos mañana a Burgos o a Menorca", indicó.

"Es un equipo muy grande, con jugadores que te impiden hacer tiros normales, sobre todo a los pívots. Son jóvenes con descaro, con ganas y pertenecen a un club que tiene una de las mejores canteras nacionales. Esa juventud tal vez les pueda pesar algo al jugar en la cancha del líder y ante un ambiente en la grada como el que se vive en el Santiago Martín", concretó Alejandro Martínez.

En lo estrictamente deportivo, el plantel aurinegro volvió a ejercitarse en el día de ayer, disponiendo el "coach" de todos sus efectivos.