Segunda semana consecutiva de ganancias de la bolsa española, que ha concluido con un alza del 1,32 por ciento después de esquivar la rebaja de la calificación crediticia a varios países europeos por parte de la agencia de medición de riesgos estadounidense Standard and Poor''s.

El golpe dado en la mesa por el examinador de las condiciones económicas y de la capacidad de pago de Estados y empresas apenas fue escuchado en los mercados, que prefirieron oír otras músicas.

El tintineo del dinero inyectado por el Banco Central Europeo alegró el baile de las subastas de deuda, a las que se acercaron las empresas dispuestas a bailar con unos resultados de cierre de 2011 que satisficieron las expectativas de los inversores.

Hermanadas la deuda y las cuentas societarias y con algunas bolsas con capacidad para orquestar el asalto a niveles desconocidos desde hace cinco meses, la bolsa española perdió la vergüenza y saltó a la pista de baile para anular las pérdidas anuales que registraba desde la tercera sesión de este ejercicio.

Hubo otros ritmos que interfirieron en la sala de baile, como el de la negociación de la quita de la deuda griega o las negativas previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) para España, que auguran dos años de recesión.

Aunque el mercado nacional se comportó como un alumno rezagado, supo aprovechar la ventaja del resto de los mercados internacionales y exprimir como un avezado danzarín las mejoras de la financiación en los mercados de deuda y los buenos resultados empresariales, como los avanzados por muchas empresas tecnológicas o financieras.

En cuanto a la evolución semanal de las principales compañías del mercado nacional, las integrantes del índice IBEX 35 (compuesto provisionalmente por treinta y seis compañías), subieron veintidós y bajaron catorce.

La mayor subida correspondió a OHL, el 8,13 por ciento, seguida de Gamesa, con un alza del 7,25 por ciento, y de Bankinter, que ganó el 6,93 por ciento tras anunciar que había aumentado su beneficio el 20 por ciento el año pasado.

Bolsas y Mercados Españoles (BME) encabezó las pérdidas con un retroceso del 2,95 por ciento, en tanto que Mapfre, por informes negativos y la rebaja de su calificación crediticia, cayó el 2,72 por ciento, y Abertis, el 2,42 por ciento.

De los grandes valores, BBVA subió el 5,66 por ciento; Banco Santander, el 5,27 por ciento, y Telefónica, el 0,07 por ciento. Bajaron Iberdrola, el 2,4 por ciento, y Repsol, el 1,1 por ciento.

La próxima semana, en la que el IBEX partirá de 8.561,90 puntos, el mercado estará pendiente de diversas reuniones, como las del Eurogrupo, Ecofín, Foro de Davos, encuentros entre dirigentes europeos, resolución sobre los tipos de interés estadounidenses o el PIB de este país.