El servicio de inspección de la Dirección General de Comercio y Consumo del Gobierno de Canarias abrió 30 expedientes por faltas graves a establecimientos comerciales del Archipiélago en el transcurso del ejercicio pasado, según datos facilitados por ese departamento autonómico, de los que el 95% corresponden a los grandes centros de distribución y el 5% a las cadenas medias, mientras que no se detectó ninguna infracción en el pequeño comercio.

En el desglose por provincias, destaca que 20 de ellas corresponden a Santa Cruz de Tenerife. En concreto, once fueron sancionados por un importe de 3.005 euros, por lo que la cuantía recaudada por la administración hasta el momento asciende a 33.055 euros. Al margen de esto, a dos empresas que habían sido multadas inicialmente se les retiró la sanción al estimarse el recurso presentado.

A su vez, al cierre de 2011 se había dado orden de inicio para la incoación de otros siete expedientes y se encontraban en fase de estudio 25 más.

En el caso de Las Palmas, se levantaron diez expedientes por faltas graves, dos de los cuales fueron sancionados, sumando entre ambos 6.014 euros. Asimismo, la unidad de inspección del departamento autonómico ordenó el inicio de los trámites para sancionar a ocho comercios y se estaba evaluando la posibilidad de proceder a la tramitación de otros 22.

En cuanto al motivo de las irregularidades detectadas, el 80% de ellos se asocia con la práctica de la venta a pérdidas, que supone ofrecer un artículo por debajo de su coste, algo que según subraya el director general de Comercio y Consumo del Gobierno de Canarias, Gustavo Matos, "es gravísimo no solo porque atenta contra la normativa vigente y la libre competencia, sino porque rompe el equilibrio entre el comercio grande y el pequeño". De hecho, enfatizó que "este es uno de los grandes objetivos de nuestro servicio de inspección".

El otro gran bloque de sanciones tienen que ver con cuestiones relacionadas con los horarios y la apertura en domingos y festivos no autorizados. Al respecto, subrayó que precisamente "durante la pasada campaña de Navidades se actuó contra grandes establecimientos que se saltaron la normativa y abrieron más horas de lo estipulado en jornadas festivas".

De manera paralela, apuntó que también durante ese periodo se hizo especial hincapié en el control de los comercios que, aunque no están especializados en el ramo, en estas fechas incorporan juguetes a su oferta, con la intención de garantizar la seguridad en este tipo de productos dirigidos a un público tan sensible como los niños".

En esta línea, resaltó que "en colaboración con la inspección de Aduanas de la Agencia Tributaria, y el Instituto Nacional de Consumo se bloqueó la entrada en Tenerife de una partida que no cumplía con los requisitos de la Unión Europea".

Matos subrayó que su departamento velará por que se cumpla con rigor con la ley, pero apuntó que "a tenor de la grave situación económica, no son momentos para ser excesivamente incisivos en el ámbito de la sanción". Además, sostiene que "en la mayoría de las veces no se incumple por mala fe sino por mero desconocimiento de los comerciantes".

Por ello, avanzó que "en los próximos meses tenemos previsto editar una serie de guías informativas para que algunos tipos de establecimientos conozcan bien las normas de consumo y comercio".

Igualmente, "vamos a intentar ahondar en el capítulo de la formación, promoviendo una serie de cursos para el sector, organizados de manera conjunta con otras administraciones y las asociaciones profesionales", apostilló.