El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ha asegurado en alusión a las nucleares que el Gobierno va a "aprovechar cualquier tipo de fuente energética" y ha señalado que algunas de estas centrales ya están amortizadas, en una entrevista con la Cope recogida por Europa Press.

"Si ya tenemos esas centrales, que son seguras, que tienen garantías y que son centrales algunas de las cuales ya están amortizadas, creemos que no es bueno infrautilizar una parte de esa capacidad", ha afirmado.

Por otro lado, advierte de que el precio de la gasolina alcanza ya 1,38 euros y ha mantenido contactos con Repsol y Cepsa acerca del embargo de crudo a Irán, en los que las petroleras le han informado de que no tiene por qué haber problemas de suministro.

"Ya estamos en precios históricos", advirtió en ministro en alusión a los carburantes. "La semana pasada presenté al Consejo de Ministros un informe donde está la gasolina a 1,38 y el gasóleo a 1,37. Son precios muy elevados", afirmó.

Estos niveles superan incluso los máximos históricos recogidos por el Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE), que en su seguimiento semanal asigna un precio de 1,367 euros para la gasolina y de 1,36 euros al gasóleo.

Por otro lado, Soria dijo que el embargo a Irán no provocará previsiblemente problemas de suministro en España. "En las conversaciones que he tenido tanto con Repsol como con Cepsa, que son las compañías más afectadas por la restricción, me dicen que no debería haber problemas de suministro", afirmó.

Soria también explicó que el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, "ha hablado con Arabía Saudí" para "garantizar" que la ausencia de crudo iraní no provoque problemas de suministro.

En todo caso, consideró necesario observar la evolución del precio del petróleo, que podría encarecer no solo los combustibles, sino también el recibo de la luz. "Vamos a ver lo que ocurre finalmente con el precio del petróleo, que por supuesto tiene un peso importante sobre el precio de la energía", dijo en alusión a la revisión de tarifas de luz en marzo.