La absolución de Francisco Camps de un delito de cohecho pasivo, junto al ex secretario general del PPCV, Ricardo Costa, generó ayer enfrentamientos con el PSOE y dudas en las filas populares, dado el convencimiento de que el expresident de la Generalitat pedirá regresar a la primera línea política.

Las preguntas más formuladas a los dirigentes del PP, incluido al propio Camps, fueron relacionadas con su futuro político, pero en ningún caso se obtuvo una respuesta concreta.

Camps manifestó ayer que no ha pensado aún qué va a hacer con su futuro político.

Desde Berlín, Mariano Rajoy, dijo que Camps "cuenta en el PP" como cualquier otro dirigente del partido y que ya se verá "qué ocurre en el futuro".

El sucesor de Camps, Alberto Fabra, le atribuyó la posibilidad de decidir sobre su futuro ("eso lo tendrá que decir él"), como la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá ("tiene todo el derecho a reivindicarse políticamente"), pero dijo: "El agua de los ríos puede regar nuevos campos, pero no vuelve atrás".

El candidato a liderar el PSOE, Pérez Rubalcaba, propuso que sea el PP el que rehabilite a Camps y lo vuelva a poner de president si realmente cree que es un ciudadano ejemplar.

El diputado del PSPV-PSOE en Les Corts Valencianes Ángel Luna, uno de los cuatro que ejercieron la acción popular en este caso, calificó el fallo del jurado de "extraordinariamente parcial y pintoresco" y mostró su predisposición a presentar un recurso.