Las obras de reposición de las viviendas de Las Chumberas (urbanización que tiene 29 bloques afectados por aluminosis) solo disponen de una inversión comprometida por las cuatro administraciones por valor de 48 millones de euros, cuando el proyecto total costará, al menos, 90 millones.

Así, actualmente la reposición de Las Chumberas dispone de 9,7 millones de euros (la mitad del Estado y la otra mitad de las tres administraciones canarias) y los 4,8 millones que el Ministerio de Fomento aportó en el ejercicio de 2011, según lo establecido en la Ley de Presupuestos Generales del Estado. A ello se suma el real decreto que aprobó el Consejo de Ministros en noviembre que articuló una subvención de 19 millones de euros para la citada actuación, que se abonará entre 2012 y 2015 y que no se hará efectiva hasta que entren en vigor los Presupuestos Generales del Estado (previsiblemente se aprobarán en marzo).

A esta inversión, se le unirá otra aportación por la misma cantidad de las tres administraciones canarias pendientes de que el Estado dé validez al citado real decreto. Cabe recordar, que el Consejo de Gobierno del Ejecutivo regional ya aprobó, el 17 de noviembre, la suscripción de dos convenios para la primera fase de la reposición y reurbanización del barrio. En total 48 millones de los 90 en los que está valorado el proyecto de reposición.

El 50% restante deberá materializarse con el nuevo Gobierno central que preside Mariano Rajoy y con el que se negociará su periodicidad y la fórmula de la subvención. Cabe recordar que de los 87,5 millones que precisa la actuación singular y la reposición, 71,89 se irán a los nuevos bloques, 4,69 a la urbanización y parque, y 999.102 al derribo de los 42 inmuebles.

Además, se está a la espera de la conformación de las comisiones institucional (cuyos componentes por parte del Ayuntamiento de La Laguna serán los concejales de Urbanismo, Juan Manuel Bethencourt, y de Vivienda, Antonio Pérez Godiño) y técnica que establece el convenio interadministrativo y que deberán dar el visto bueno al proyecto de reposición. A ello se suman, los cambios organizativos en el Ministerio de Fomento, con la eliminación de la Secretaría de Estado de Vivienda, que han retrasado el proceso de constitución de dichas comisiones.

Asimismo, antes de iniciar el proyecto se deberá realizar una modificación del planeamiento que dé cabida a la actuación para definir las alturas de los 28 nuevos edificios proyectados en un principio (frente a los 42 que ahora forman la urbanización) y que deberá aprobar la Cotmac. Una vez dado el visto bueno al instrumento urbanístico de la actuación, tendrán que licitarse la redacción de los diferentes proyectos de urbanización, demolición y edificación. Finalmente (previsiblemente a finales de 2012 o comienzos de 2013), ya con los proyectos aprobados, saldrá a licitación la ejecución de la obra para, acto seguido, iniciar los trabajos.

La memoria del proyecto ideada por Muvisa deberá ser supervisada por las citadas comisiones y por los propios vecinos de Las Chumberas. Sin embargo, los objetivos esenciales ya han sido comunicados y pasan por dotar de mayor altura a los edificios, dar mayor amplitud al barrio y ganar en espacios públicos abiertos, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de sus habitantes y evitar los "recovecos" que conforman en la actualidad esta zona.

Cabe recordar que las viviendas resultantes serán VPO, por lo que se deberán dedicar a vivienda habitual y el Instituto Canario de la Vivienda tendrá la primera opción de compra, por lo que no se podrá especular con ellas.

Paralelamente se realizará el asesoramiento a los vecinos para dilucidar cualquier duda sobre la titularidad de sus propiedades, el proceso de expropiaciones o la renegociación de la hipotecas con las entidades financieras. Para ello se instalará una oficina de información en el propio barrio.

Viviendas desalojadas

La Gerencia Municipal de Urbanismo realiza un seguimiento especial a los 29 bloques afectados por aluminosis y se continúan realizando apuntalamientos de viviendas. En torno a cincuenta de ellas ya han sido desalojadas y muchas de las familias han sido realojadas en otros pisos del municipio, cuyo alquiler es abonado por el ayuntamiento.

Si no se opone ningún dueño de las 675 viviendas y locales comerciales, los 42 edificios pasarán a ser solo 28, lo que permitirá un considerable cambio en el aspecto y la distribución de esta urbanización precisamente para que no dé la impresión de ser una especie de barriada. Para ello, se aumentarán las alturas actuales hasta seis o siete y, si se respalda la previsión más sólida de los técnicos de Muvisa, se contará con 24 viviendas por bloque, lo que hará un total de 28. Además, y aunque en su interior tendrán unas mismas características, el aspecto externo de los distintos bloques será diferente para evitar la sensación de urbanización.

Asimismo, la intención inicial es la de que se construyan los primeros bloques antes de derribar ninguno para que los vecinos puedan ver cuál será el modelo a seguir.