Agotados acabaron los futbolistas del Tenerife el partido. Al final, todos destacaron el esfuerzo que hicieron en los últimos 30 minutos por mantener la ventaja que habían conseguido. "El sufrimiento valió la pena", celebró Aridane. "El equipo luchó con uno menos y se notó que estábamos comprometidos en sacar el resultado", añadió. El punta insistió en que el resultado debe serviles para demostrar que "el equipo está unido y es trabajador". "Ganar fuera no es fácil y hemos dado la cara", agregó.

Está en racha.- Al grancanario le tocó una dura labor. Para empezar, tuvo que "entrar frío" al terreno de juego en el minuto 20 por la lesión de Kiko Ratón. Y, al final, le pasó factura, pues jugó el último tramo del encuentro con molestias. Aunque, no quiso dar importancia al asunto. "Es normal que pase después de estar media hora defendiendo", dijo. Tampoco resaltó su gol. Se limitó a reseñar que "el centro de Luismi fue bastante bueno". Y en esta línea ni siquiera tomó en cuenta el hecho de que lleva tres goles en los cuatro partidos que ha participado desde que llegó a principios de enero y que su media es de un tanto cada 67 minutos.

Chechu se estrenó.- El interior estaba de enhorabuena ayer, por su estreno como goleador. "Había tenido ocasiones, pero no tuve la suerte de enchufarlas", recordó. Eso sí, luego dejó claro que lo "realmente importante" es que habían conseguido los tres puntos en juego, en un campo en malas condiciones y después de una semana de cambios. "Ha sido dura y de trabajo, pero al final dio sus frutos", comentó Chechu.