El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, ha asegurado hoy que su partido "tiene constancia" de que la situación económica del Gobierno vasco reviste una "extrema gravedad" por el "déficit desbocado" y la "falta de recursos" existentes y ha afirmado que ve riesgo de "quiebra inminente".

En una rueda de prensa celebrada en Bilbao, Urkullu ha explicado que el conocimiento del "desfase económico" que "amenaza con colapsar la acción inmediata" del Gobierno vasco está avalada en "datos propios" y por la llamada "desesperada" de un consejero de "peso" de Patxi López -cuyo nombre no ha desvelado- que "reclamaba ayuda al PNV para encontrar soluciones o nuevas vías de inyectar recursos extraordinarios a las vacías arcas gubernamentales".

El presidente del PNV ha exigido al Gobierno del lehendakari López "transparencia y realismo" ante la próxima reunión del Consejo Vasco de Finanzas y ha pedido que presente allí el "estado real de sus cuentas" y el "afloramiento de su déficit acumulado" para poder hacer frente a esta "delicadísima situación financiera".

Preguntado a cuánto podría ascender el "agujero" en las arcas del Gobierno vasco, Urkullu ha asegurado que podría alcanzar los mil millones de euros.

"La estimación que tenemos del déficit público en el Consejo Vasco de Finanzas de octubre pasado era de unos 706,5 millones de euros, con la percepción de que un 50 % más de esa cifra se haya incrementado", ha explicado Urkullu, quien ha recordado que el Ejecutivo ha llegado al límite de deuda posible.

Ante esta situación de "emergencia", el dirigente nacionalista se ha mostrado dispuesto a "arrimar el hombro", pero partiendo de un ejercicio "sincero y descarnado" de transparencia en las cuentas.

Ha exigido también al Gobierno vasco que dé a conocer el "escenario de amortizaciones previstas", así como que haga públicos a la "mayor brevedad" los datos disponibles del grado de ejecución presupuestaria del ejercicio de 2011, los compromisos plurianuales aprobados y su calendario de afección.

Además, ha requerido al Ejecutivo de López el "cese" de manifestaciones que "a modo de cortina de humo" pretenden hacer un ejercicio de "escapismo premeditado".

"No casan las peticiones angustiosas de colaboración hechas en privado con posiciones públicas displicentes, contradictorias e irresponsables", ha censurado Urkullu, quien ha criticado la actitud de "menosprecio" mostrada por el Gobierno Vasco ante el "ánimo sincero de colaboración" de su partido.

Ha reiterado que el PNV está dispuesto a "sacrificarse políticamente" ante esta "grave" situación, aunque ha dicho que no participará en "operaciones tácticas que pretendan aliviar temporalmente necesidades contables sin calado ni profundidad".

Urkullu ha hecho un "llamamiento especial" al PP, socio preferente del PSE en el Gobierno Vasco, para que "comparta" el "desvelo por la grave crisis deficitaria detectada" y "conjuntamente" puede hacerse frente a esta situación "crítica".

"La solvencia de las instituciones del país está para el PNV por encima de cualquier interés político particular", ha resaltado Urkullu, quien ha pedido un ejercicio de "gobierno" a López y ha reiterado que un posible adelanto electoral en Euskadi está en manos del lehendakari y del PP.