APELLIDO portugués que pasó a Extremadura, donde fundó nueva Casa y a Canarias. Otra rama pasó al Perú. Francisco de Chaves se estableció en Tenerife a raíz de la Conquista. Era hijo de Juan Fernández y de Margarita Annes, dueños en partes de la tierra de Chaves, en el lugar de Escopes, en Portugal. Contrajo matrimonio con Catalina Hernández Tacoronte, de la familia real indígena de la Isla, con la que tuvo cuatro hijos, siendo el sucesor Marcos Hernández Chaves.
Esta familia se denomina asimismo Márquez de Chaves, Martín de Chaves y González de Chaves.
El referido Marcos Hernández de Chaves fue alcalde del Realejo Alto y casó con María Hernández. Tuvieron seis hijos, continuando la línea el primogénito de igual nombre y apellido que su padre (y su hermana Fabiana, con la que se inicia la línea actual de la familia González de Chaves). Nació, como sus hermanos, en el Realejo Alto y recibió el bautismo el 30 de septiembre de 1566. Estuvo casado con Catalina Fernández, hija de Antonio Fernández Báez y Ana Jorge, cuyo fruto fue Francisco Márquez de Chaves. Capitán de las Milicias del País, nacido el 16 de febrero de 1603, que contrajo matrimonio con María Pérez Barroso, hija de Simón Díaz Barroso, el 13 de noviembre de 1632.
De dicho enlace nació doña María Barroso de Chaves, que sucedió en las vinculaciones fundadas por su tío el Licenciado Fernández Barroso y contrajo nupcias con don Sebastián Machado Spínola y Lugo. Regidor de Tenerife, jefe de la Casa de Machado en Canarias.
Viudo don Francisco Machado Márquez, contrajo segundas nupcias con Margarita Lorenzo, el 18 de octubre de 1638, de las que nacieron Fray Juan de Chaves, religioso de la Orden de San Agustín, y doña Jerónima de Chaves, que se casó con el Teniente de Caballos Corazas, don Diego Díaz de Oramas.
Don Juan Ignacio de Chaves fue creado Marqués de Bermudo en 5 de septiembre de 1689. En 23 de agosto de 1820 fue creado duque de Noblejas don Mariano del Amparo de Chaves y Villarroel, VII Conde de Noblejas, Caballero de las Órdenes de Santiago y Carlos III en 1838.
Otros caballeros de este apellido probaron su nobleza en las Órdenes de Santiago, Calatrava, Alcántara, Carlos III y San Juan de Jerusalén.
ARMAS
En campo de gules, cinco llaves de oro, puestas en sotuer, con los ojos hacia abajo; bordura de gules, cargada de aspas de oro, alternando con las quinas de Portugal. (Escudo 239).
Bibliografía
- "Nobiliario de Canarias, tomo II, pág. 952 y IV, pág. 211. Nobiliario Español, de Julio Atienza, pág. 330. Heráldica de los Apellidos Asturianos, de Francisco Sarandeses, pág. 127.Conquista y Antigüedades de las Islas de Gran Canarias , de Juan Núñez de la Peña.