El presidente de la Federación Canaria de Islas (Fecai) y presidente del Cabildo de Fuerteventura, Mario Cabrera, ha querido este miércoles informar a sus compañeros sobre las prospecciones petrolíferas que se pretenden llevar a cabo en el archipiélago y que afectaría, principalmente, a Fuerteventura y Lanzarote.

Cabrera, en declaraciones a los medios y aunque se trata de un punto que no estaba en el orden del día de la Fecai, ha asegurado que se está dando "mucha información falsa".

"No es cierto que estemos a 60 millas, estamos a escasos 10,8 kilómetros del punto más cercano a Fuerteventura. No es cierto que sea la misma bolsa la que pincha Marruecos y la de Canarias, son bolsas distintas, una está en suelo continental y otra en el fondo oceánico. No es cierto que el informe ambiental recoja lo que se nos dice, está muy limitado, no está contrastado que no afecta a los cetáceos, que hay medidas correctoras para que cuando llegue cualquier vertido no se nos cierre nuestras desaladoras de agua, en Fuerteventura y Lanzarote vivimos 100 por 100 de la desalación de agua", apuntilló.

Por ello, dijo, que en los 10 días que el Ministerio de Industria ha incrementado el plazo para presentar alegaciones, alegarán "más documentación" porque, indicó, que han tenido "poco tiempo y poca información".

"Lanzarote y Fuerteventura hemos coordinado acciones y nosotros hemos ido un poco más allá porque hemos coordinado acciones también con el Ayuntamiento de Valencia, hemos compartido con su departamento jurídico propuestas que ellos ya han presentado en ese contencioso que tienen establecido", explicó.

Cabrera ha insistido en que en la información que le han hecho llegar a ellos, no se plantean "mecanismos de actuación rápida para que cualquier escape llegue a las costas y paralice" la industria de las islas implicadas.

Para el presidente del Cabildo de Fuerteventura en las prospecciones que se plantean "todo es peligroso". Además, señaló que Repsol "ha querido matar moscas a cañonazos y ha dado un argumento más. Efectivamente que los barcos están pasando por las costas --de Fuerteventura--".

Añadió que esto llevan denunciándolo "años, están contaminando", y afirmó que muestra de ello es que la institución insular tiene que limpiar el litoral "de bolas de biches porque siguen limpiando los depósitos cuando pasan por Canarias y eso tiene que estar regulado por Europa o España".

Cabrera también criticó que Repsol no dice qué medidas tecnológicas tienen para cuando pinchen a 1.600 metros de profundidad, que aseguró está de lámina de agua, para sacar el material, qué herramientas tienen en caso de que se produzca cualquier avería para cerrar rápido. "Eso no lo han dicho", apuntilló.

Para el también presidente de turno de la Fecai "lo inteligente es que cada cabildo presente sus alegaciones", de ahí que en el caso de Lanzarote se "está insistiendo mucho en el tema medioambiental", mientras que Fuerteventura está centrada en el "agua, en la falta de información".

"De lo que se trata es de una batería de acciones que permita que el Ministerio se siente a hablar con nosotros y podamos retrotraer ese expediente. El Ministerio está corriendo a una celeridad asombrosa porque es consciente de que al inicio de 2013 estará en marcha el reglamento europeo que es mucho más estricto que lo que hoy está en vigor", apostilló.

SUBVENCIONES AL AGUA DESALADA

Por otra parte, y en relación a uno de los puntos del día de la reunión de la Fecai, el de las subvenciones del Gobierno central a la desalación de agua en Canarias, Cabrera explicó que esto implica un coste "elevado" de energía, de ahí que desde hace años el archipiélago reciba una serie de prestaciones al respecto, alcanzando su máximo en 16 ó 17 millones de euros, y ahora está alrededor de los 9 millones de euros.

Esta diferencia, que calificó de "brutal", podría llevar a subir las tarifas de agua a los consumidores. Este punto, recordó, ya se le trasladó al ministro de Industria, José Manuel Soria, que quedó en estudiarlo para ver si se podía mantener, los 13 millones de euros de 2010.

Agregó que dicha cifra sería "aceptable" porque "no se seguiría perdiendo" financiación.