El alcalde de Barcelona, Xavier Trias, descartó que la huelga de transporte público convocada para finales de febrero afecte a la continuidad de la celebración del Congreso Mundial de Móviles en la ciudad, prevista hasta 2018, a la vez que pidió que se encuentre una solución que evite el paro.

Los sindicatos de la sociedad Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB), que incluye autobuses y metro, han convocado una huelga para los días 27, 28 y 29 de febrero y 1 de marzo, coincidiendo con la celebración en Barcelona de este congreso de importancia mundial.

Trias señaló que ha mantenido contactos recientemente con el consejero delegado del evento, John Hoffman, en los que no se ha planteado la posibilidad de rescindir el contrato por este motivo, si no que han hablado sobre la fundación Barcelona Mobile World Capital Foundation.

"El señor Hoffman, con toda lógica, esta preocupado por que haya una huelga, pero también le explico que en Barcelona ya sabemos lo que es la huelga y tenemos capacidad de reacción y de hacer las cosas", declaró Trias a los medios de comunicación durante la visita que realiza hoy a Bruselas.

El alcalde aseguró que las 65.000 personas que prevé que acudan al evento serán atendidas "perfectamente", ya que podrán recurrir al transporte privado, como el taxi o las empresas de autobuses.

Trias consideró una "gran irresponsabilidad" la decisión de los sindicatos de convocar la huelga en esas fechas y señaló que espera que cambien de parecer.

El alcalde señaló que preferiría evitar la huelga, pero advirtió de que en ciertas ocasiones "no se puede negociar".

El político nacionalista explicó que no se puede "caer en la trampa" de ceder para evitar un paro durante la celebración de un congreso a cualquier precio, porque entonces cada vez que se planee un evento se repetirán "amenazas y problemas, y así no se podría gestionar un país y una ciudad".

Durante su jornada en la capital de la Unión Europea, Trias se entrevistará con el comisario europeo de Energía, Günter Oettinger, para impulsar la apuesta de Barcelona en el ámbito de las "Smart Cities" (ciudades inteligentes) y participará en la primera edición de la Urban Forum, con representantes de otras ciudades y de instituciones comunitarias.