La bolsa española bajó ayer el 2,1%, perjudicada por el retroceso de la banca tras acabar la prohibición de efectuar ventas a corto con sus títulos y por el nuevo retraso en la entrega del segundo rescate a Grecia.

En concreto el Íbex 35 cedió 183,50 puntos, la mayor caída desde el pasado 5 de enero, hasta situarse en los 8.558,10 puntos.

Las entidades financieras española fueron las principales damnificadas al reducir su valor en 5.411 millones de euros.

Además, la banca se vio afectada por la advertencia lanzada por la agencia de medición de riesgos Moody''s, que anunció que revisará la calificación crediticia de 114 entidades financieras europeas, entre ellas todas las españolas.

Según los analistas, la caída del sector financiero en el parqué se debe, además, a los malos resultados registrados por algunos de los grandes bancos europeos al cierre del ejercicio.

En cuanto a la incidencia del retraso del segundo rescate a Grecia, el propio ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, reconoció que hay algunos países europeos que piden "un aseguramiento adicional" que garantice la aplicación de las medidas de austeridad aprobadas por el Parlamento heleno.