Los jefes de Gobierno de doce países de la UE, entre ellos el español, Mariano Rajoy, enviaron ayer una carta a los principales responsables comunitarios con un programa de ocho puntos concretos para promover el crecimiento económico y luchar contra la crisis desde la UE.

A la carta -destinada a los presidentes del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy; y de la Comisión, José Manuel Durao Barroso- no se unieron Alemania ni Francia, las dos primeras economías de la eurozona y de la UE. La misiva afirma que la actual crisis que afronta Europa es también "una crisis de crecimiento" y, aunque no rechaza la tarea "esencial" de poner en orden las finanzas nacionales, considera "necesario" modernizar la economía, aumentar la competitividad y corregir los desequilibrios macroeconómicos.

Bajo el título "Un plan de crecimiento para Europa", los doce líderes afirman: "debemos restablecer la confianza, entre ciudadanos, empresas y mercados financieros, en la capacidad de Europa para crecer de forma firme y sostenible".

Advierten de que Europa se halla en un momento "peligroso", ya que el crecimiento se ha "estancado" y el paro está aumentando, lo que hace que los ciudadanos y las empresas afronten "las condiciones más duras" en muchos años.

El programa concreto que proponen para fomentar el crecimiento incluye ocho puntos, entre ellos desarrollar aún más el mercado único de la UE, especialmente en el sector servicios, así como la creación de un auténtico mercado digital europeo para 2015.

La carta fue enviada por el jefe del Gobierno español junto con el británico Cameron, el italiano Monti, y los de Holanda, Estonia, Letonia, Finlandia, Irlanda, República Checa, Eslovaquia, Suecia y Polonia.